Economía
Baile entre las 'big four'

Ernst & Young (EY) se hace con la auditoría de Red Eléctrica entre 2023 y 2025 en sustitución de KPMG

  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

El último concurso de una empresa del Ibex para elegir nueva auditora se ha resuelto: Red Eléctrica ha seleccionado a Ernst & Young (EY) para revisar sus cuentas entre 2023 y 2025. Esta firma se ha hecho recientemente también con el contrato de BBVA y se erige como la vencedora del baile de auditores que han protagonizado las grandes compañías españolas.

Hasta ahora, la empresa que preside la socialista Beatriz Corredor estaba auditada por KPMG, pero debía cambiar de firma en 2023 por las exigencias del reglamento de Auditoría de Cuentas, que obliga a las compañías a sustituir al auditor cada 10 años.

Como ha denunciado OKDIARIO, varios escándalos afectan a Red Eléctrica. La citada Corredor ha duplicado la cúpula directiva de la empresa para hacer hueco a varios amigos de la exministra sin obligar a salir a los altos cargos nombrados por el anterior consejero delegado, Juan Lasala. Además, éste sigue controlando la empresa en la sombra, pese al evidente conflicto de interés que supone su cargo actual como presidente de Capital Energy (como todas las eléctricas, cliente de REE).

Además de BBVA -que ha arrebatado a KPMG-, EY ha conseguido hacerse con los contratos para revisar las cuentas de OHL, Inditex y Mercadona, en todos los casos en sustitución de Deloitte, que era la principal auditora de las grandes empresas españolas en los últimos años. En el otro lado, la pequeña de las big four ha perdido a Naturgy, que pasará a manos de KPMG.

El gran perdedor de este baile ha sido PwC, que lideró el ranking de ingresos por auditoría en España en 2020 con 149,3 millones. Su mayor cliente sigue siendo Banco Santander, que supone el grueso de sus ingresos por esta actividad. En el lado positivo, incrementará su facturación a CaixaBank tras la integración de Bankia, que antes estaba auditada por KPMG.