Economía

El IPC cierra febrero en el -0,8% lastrado por los precios de la energía

El Índice de Precios al Consumo (IPC) sigue en terreno negativo como consecuencia de la caída del precio de la energía, fundamentalmente del petróleo. Este indicador ha cerrado el mes de febrero en el -0,8% interanual, lo que supone una reducción de cinco décimas respecto al contabilizado en enero, según el indicador adelantado que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Fuente: INE (Pinchar en la imagen para ampliar)

Aunque estos datos puedan indicar que existe deflación en España, la realidad es que hay que fijarse en los componentes desagregados para ver que existen productos básicos que han experimentado importantes subidas en los últimos doce meses. El INE no ofrece aún las cifras de febrero, pero las de enero revelan que, por ejemplo, el precio del aceite de oliva sube un 22% interanual, el de las patatas un 14% y el del pescado un 10%.

De hecho, la inflación subyacente, que es la que descuenta del IPC los precios de la energía, creció a un ritmo del 0,9% anual en enero. Esta variable se mantiene en niveles positivos desde enero de 2015, lo que supone que las familias siguen viendo como las facturas de supermercados, restaurantes, hoteles, colegios y médicos son cada vez mayores a pesar de que el IPC oficial está en negativo.

Datos a cierre de enero. (Pinchar en la imagen para ampliar)

Los datos, por lo tanto, descartan que España esté en una espiral deflacionista, tal como ha apuntado en varias ocasiones el ministro de Economía, Luis de Guindos. Es la energía la que enmascara la subida de productos básicos, pero la mala noticia para los hogares y las empresas es que la bajada de las materias primas no se traslada directamente a sus facturas energéticas, debido al alto componente fiscal.

La deflación, por lo tanto, es un espejismo estadístico, ya que en los próximos meses desaparecerá el “efecto base” del precio de la energía y comenzará a estabilizarse la comparación interanual en esta rúbrica, presionando al alza sobre el IPC.

Además, las nuevas medidas de estímulo del Banco Central Europeo (BCE), que serán anunciadas en la primera mitad de marzo, intentarán elevar de forma artificial este indicador mediante la inyección de dinero de nueva creación en la economía.