La construcción mantiene las tasas más altas de paro de larga duración pese a las promesas de Sánchez
Las familias con menores recursos dedican el 60,2% de su presupuesto a vivienda


Casi la mitad de los parados en el sector de la construcción, el 44% del total, es de larga duración, es decir, su antigüedad en la demanda de empleo ha superado los 365 días, según el Observatorio Industrial de la Construcción de la Fundación Laboral de la Construcción. Así, la crisis de vivienda que sufre España muestra otra de sus aristas: la de aquellos que tienen enormes dificultades para reincorporarse a un mercado que no es capaz de construir las viviendas suficientes para surtir la alta demanda.
El informe también revela que los parados en la construcción con cualificaciones específicas, como Certificados de Profesionalidad, Formación Profesional o títulos universitarios, representan solo el 9,5% del total, lo que equivale a 18.843 personas.
Dentro de este grupo, un 3,8% cuenta con Formación Profesional de Grado Medio o Superior, mientras que un 3,1% posee Certificados de Profesionalidad en Edificación y Obra Civil (EOC) en los niveles 1, 2 y 3.
Estos datos refuerzan la relación entre las cualificaciones específicas y una alta tasa de inserción laboral en el sector, especialmente a través de los Certificados de Profesionalidad y los procedimientos de acreditación de competencias.
Entre los Certificados de Profesionalidad con menor número de desempleados se encuentran especialidades como armaduras pasivas para hormigón, control de ejecución de obras civiles y encofrados, que registran diez o menos personas desempleadas.
En el caso de los títulos de Formación Profesional, destacan por su baja tasa de paro los de Técnico Superior en Organización y Control de Obras de Construcción y Técnico en Construcción.
Los parados en la construcción
El perfil predominante de las personas desempleadas en el sector de la construcción corresponde a hombres de nacionalidad española, que representan el 83,3% y el 83,8% respectivamente.
La mayoría de estos trabajadores, un 49,4%, estaban vinculados a actividades de construcción especializada. En contraste, las mujeres representan solo el 16,7% del total de desempleados en este sector, y los trabajadores de origen extranjero constituyen el 16,2%. De estos últimos, un 65,9% procede de países extracomunitarios, mientras que el 34,1% es de países comunitarios.
En comparación con el año anterior, se registra una disminución en todos los parámetros del desempleo en el sector. El número de hombres desempleados cayó un 7,4%, el de mujeres un 5,9%, el de nacionales un 8% y el de extranjeros un 2,4%, lo que indica una mejora generalizada en los niveles de empleo en la construcción.
Gasto en vivienda
Por otro lado, los españoles cada vez se ven obligados a dedicar más parte de su renta a la vivienda. Según la Encuesta de Presupuestos Familiares publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2024, los hogares destinaron la mayor parte de su gasto a vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, con un promedio de 32,4 euros de cada 100 euros gastados. Tras ello, las familias dedicaron 15,8 euros a alimentación, 11,4 euros a transporte y 9,9 euros a restaurantes y hoteles.
Dentro de la categoría de alimentación, los mayores consumos se distribuyeron en carne, que representó el 3,6% del gasto total, seguida de pan y cereales (2,1%), leche, queso y huevos (2%), legumbres, hortalizas y patatas (1,8%), pescado (1,6%) y frutas (1,5%). Estos productos destacan como los principales en el presupuesto alimentario de los hogares.
En cuanto a la distribución del consumo entre los diferentes grupos, los hogares con menor gasto (quintil 1) dedicaron el 60,2% de su presupuesto a vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles y alimentos y bebidas no alcohólicas, mientras que el 20% de los hogares con mayor gasto (quintil 5) destinaron menos de la mitad de su presupuesto (40,1%) a este tipo de gastos.
Por otro lado, el 20% de los hogares con más gasto dedicaron más de un tercio de su presupuesto (33,9%) a transporte, restaurantes y hoteles y a ocio y cultura, frente al 15,9% de los hogares con menor gasto.