Todas las claves para adaptarse a la revolución 4.0
La revolución tecnológica es imparable. Algunas de las tareas que hoy realizamos las personas las podrán desempeñar, de una forma más eficiente y a una mayor velocidad, máquinas y robots que habrán sido, justamente, desarrollados por nosotros. Del mismo modo, la digitalización ha transformado por completo el mercado laboral y ha dejado obsoletas una serie de profesiones que, hace unos años, parecían gozar de una sólida posición en el mercado.
De hecho, importantes multinacionales ya están realizando inversiones aún más allá, en términos de inteligencia artificial. Parece que será, con total probabilidad, el siguiente eslabón en la revolución que estamos viviendo. A partir de aquí, la pregunta es obvia: ¿Cómo nos afectará? ¿Qué podemos hacer para evitar que estas innovaciones no nos hagan quedar atrás? A continuación, explicamos cómo deben adaptarse las empresas a la industria 4.0.
¿Qué consecuencias tendrá este desarrollo?
Algunos de los aspectos que tendrán que tener en cuenta las empresas a la hora de invertir para mantener su competitividad son los siguientes:
- Automatización de los puestos de trabajo: es el primer efecto y el que se notará en menos tiempo: algunas tareas ahora realizadas por personas serán desempeñadas de forma automatizada. Un ejemplo lo tenemos en el metro. Las nuevas líneas ya no precisan de conductores y los trenes avanzan de forma automatizada mediante la vigilancia de un centro de control.
- Capacidad para elegir la información necesaria y trascendente: el contexto del Big Data permite a todos los usuarios disponer de una grandísima cantidad de información. Ahora bien, de toda esta información solamente necesitamos una pequeña parte. Alguna es directamente falsa y otra, en cambio, sencillamente innecesaria. Una habilidad clave será, pues, tener la capacidad de, una vez recogida la información, saber escogerla adecuadamente de acuerdo a los fines buscados.
- Fomento de las habilidades sociales: la principal diferencian entre los humanos y las máquinas o robots es la posibilidad de comunicarnos y mostrar y expresar emociones. Dado que desde un punto de vista de realización de tareas una máquina puede ser más eficiente, al final, el gran valor diferencial en toda compañía y profesional será la capacidad de ofrecer un trato y atención lo más próxima y empática posible.
- Desarrollar los avances tecnológicos que surjan: toda empresa, si quiere mantener una posición de competitividad en el mercado, tendrá que estar continuamente innovando e incorporando en sus procesos las novedades que surjan en el mercado.
- Disponer de personal formado adecuadamente: el equipo que forma parte de la empresa deberá de ser capaz de utilizar de la forma más productiva posible todas y cada una de las innovaciones que se vayan incorporando.
- Cambio de rol de la dirección: dado que las máquinas realizarán la mayor parte de las tareas, la dirección podrá focalizar toda su acción en tomar las decisiones más estructurales sobre la evolución del negocio y no preocuparse sobre aspectos tan concretos de la actividad.
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