El CNI busca un ‘caballero blanco’ español para que DIA no acabe en manos extranjeras

El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) está siguiendo muy de cerca la operación que maneja el magnate Mijaíl Fridman, que ha lanzado una OPA para controlar totalmente la empresa de alimentación DIA, y tras mostrar sus reticencias a que el inversor ruso se haga con la compañía ha hecho algunos movimientos para evitar que el histórico grupo español quede en manos extranjeras.

«El CNI únicamente puede meter presión a los accionistas españoles y está buscando un caballero blanco», reconocen fuentes conocedoras, que aseguran que ya se han mantenido conversaciones con un gran grupo de distribución nacional sin que la idea tuviera éxito.

Según las citadas fuentes, a Inteligencia «no gusta Fridman», pero «tampoco gustaría ninguna otra alternativa extranjera», como podrían ser Lidl, Amazon o Carrefour. Sin embargo, la búsqueda del una empresa ‘salvadora’ que entre con fuerza en el capital de DIA -a través, claro está, de una contraopa a Fridman-, no está resultando fructuosa, toda vez que, por el momento, no parece que haya ningún interesado nacional.

Como ya avanzó OKDIARIO, la división económica del CNI se opone a que el ruso controle la compañía aunque «si pone el dinero y cumple la norma poco se puede hacer», explican estas fuentes.

Investigación de Economía y Tecnología

Fuentes de la inteligencia española aseguran que investigan esta operación como “todas las operaciones empresariales” y que existe en el Centro una división especializada para este tipo de operaciones financieras, la División de Economía y Tecnología. Por supuesto, el objetivo del Centro es siempre la defensa de los intereses del país frente a terceros.

“Se investiga todo”, asegura una fuente externa pero que colabora con el CNI en operaciones similares. «Se investigó la entrada de la rusa Lukoil en Repsol, cuando se habló en prensa de que petrolera rusa quería lanzar una OPA por la española. Siempre se investiga, y si son rusos, más», señala esta fuente.

Fuentes empresariales conocedoras de la situación aseguran por su parte que el CNI “está torpedeando” la entrada del ruso en DIA, “aunque si pone el dinero y cumple con la norma española poco se va a poder hacer”, explican. “En realidad, nadie quiere que el ruso compre DIA. Ni la banca ni el Consejo de Administración actual, pero tiene mucho dinero”, insisten.

El pasado de Fridman y las operaciones empresariales que ha protagonizado a lo largo de su carrera financiera, tanto en el extranjero como en España, no juegan a su favor. El ruso ya se ha visto envuelto en problemas por su asalto a la española ZED, una operación que se está investigando en la Audiencia Nacional por administración desleal e insolvencia punible.

OPA… con condiciones

El inversor ruso Mijaíl Fridman, a través de su fondo Letterone, lanzó una OPA por la cadena de supermercados, condicionada a que los accionistas rechazasen la ampliación de capital de 600 millones que la compañía ha propuesto a la junta y a obtener un respaldo mínimo del 35,5%. El precio: 0,67 euros por acción.

Letterone, además, ha pedido una refinanciación de la deuda para que DIA pueda poner en marcha su plan de negocio. El problema: la banca exige una inyección de capital.