Economía
El banco, acreedor de Abengoa, advierte que Urbas no ofrece precio

CaixaBank se une a Estados Unidos y llama la atención al Juez de Abengoa sobre la oferta de Urbas

CaixaBank, acreedor de Abengoa, se suma a las dudas que ha generado entre otros acreedores de la compañía energética española la oferta presentada por la constructora Urbas, y requiere al Juzgado que se exija mayor concreción a la empresa.

Como ha publicado este periódico, Exim, el organismo oficial estadounidense de apoyo a la exportación, ha reclamado al Juzgado Mercantil número tres de Sevilla, al frente del proceso concursal en el que están inmersas una treintena de sociedades de Abengoa, que se impida la oferta de Urbas por falta de precisión.

Urbas, dice CaixaBank en su escrito al Juzgado, presentado la pasada semana, al que ha tenido acceso este periódico, «se limita a proporcionar un plan de negocio, un dossier informativo y la mera mención a una propuesta de financiación no vinculante que se encontraría en ‘proceso de discusión con diferentes entidades financieras’ en el momento de presentación de la oferta».

La constructora presidida por Juan Antonio Acedo, sostiene CaixaBank, «no ha proporcionado documentación acreditativa alguna de los recursos con los que cuenta» para afrontar la compra de Abengoa. Además, añade la entidad financiera, Urbas no ha informado sobre el estado de su oferta ni ha aportado «ningún tipo de acuerdo preliminar, carta de intenciones o carta de patrocinio que permita al Juzgado y a las partes personadas» tener certeza sobre su capacidad financiera.

«Resulta especialmente llamativo», destaca CaixaBank, representado en este caso por el despacho Allen & Overy, «una oferta de adquisición de una unidad productiva que carece de precio (…) más allá de una mera valoración económica en el que se incluye una serie de conceptos inconexos e indeterminados desde un punto de vista pecunario».

Las ofertas de RCP y Ultramar

CaixaBank también requiere al Juez mayor precisión sobre el contenido de las ofertas presentadas por Abengoa por parte de los grupos RCP y Ultramar.

RCP ha presentado dos ofertas con el apoyo de Sinclair Reserve Capital, una global en la que se pretende adquirir la unidad productiva compuesta por todos los activos del grupo, y otra parcial por proyectos específicos.

El banco presidido por José Ignacio Gorigolzarri advierte que la oferta de RCP «no proporciona un precio alternativo» y requiere que sea aclarada.

Igualmente señala que la oferta de Ultramar no distingue un precio que se ofrecería con o sin subsistencia de las garantías, «limitándose a fijar un simple importe para cada sociedad».

La oferta de Ultramar, dice CaixaBank, «debería ser competidora con la realizada por Urbas», pero, lamenta, «el perímetro aparentemente no es coincidente» lo que hace muy difícil la comparación entre una y otra.

CaixaBank afirma que la «parquedad y generalidad» de las ofertas iniciales «no nos permite hacer ni una concreta valoración ni una comparación entre ellas».

HSBC, en contra

El banco HSBC, otro de los acreedores relevantes de Abengoa, también ha llamado la atención al Juzgado sobre el proceso de venta de las sociedades de la multinacional sevillana.

La entidad, representada por Cuatrecasas, advierte en un escrito enviado al Juzgado a finales de diciembre, que el contenido de las ofertas de Urbas, Ultramar y RCP  «inciden negativamente en los derechos de los acreedores afectados». Las ofertas, dice, no han recabado «en modo alguno el consentimiento de los acreedores privilegiados a la liberación de las garantías reales sobre los activos».

HSBC explica que, junto a otros fondos acreedores, impugnan las ofertas presentadas y ejercitan «su derecho de veto a la inclusión de cualesquiera activos gravados a su favor», así como a la liberación de las garantías personales y deuda intragrupo que pudiera resultar como consecuencia de la aprobación de cualquier oferta.