Economía
impuesto a la banca

Bruselas advierte a Sánchez sobre el impuesto a la banca: «Hay indicios de que penaliza el crédito»

La Comisión Europea advierte en su último informe sobre la economía española que el impuesto a la banca que el Gobierno de Pedro Sánchez quiere hacer permanente es negativo para la banca y para la concesión de crédito a las pequeñas y medianas empresas. Bruselas llega a recordar en dicho informe que hay otras opciones encima de la mesa para evitar este impuesto tal y como está en estos momentos, que pasa por darle la opción a los bancos de destinar esos fondos a elevar los niveles de capital, «reflejando los cambios recientes en el diseño legal del impuesto bancario italiano», señala.

«El sector bancario se ha mantenido resiliente, en medio de la continua incertidumbre geopolítica y condiciones financieras más restrictivas para los prestatarios, pero los ratios de capital de los bancos españoles siguen
siendo inferiores a los de sus pares de la UE», señala la Comisión Europea en su informe sobre España, en el que ha librado al Gobierno de abrirle un proceso por déficit excesivo, ya que confía en que lo baje del 3,6% al 3% a final de año.

Bruselas no pone en duda la eficiencia de la banca española, pero sí subraya que los ratios de capital son inferiores a sus rivales europeos. Por eso, la Comisión genera incertidumbre sobre la conveniencia de hacer permanente el impuesto a la banca de Sánchez, tal y como está en este momento, que grava el 4,8% de los ingresos por margen de intereses y comisiones netas generadas en España.

«En el debate sobre si hacer permanente el impuesto bancario, es importante considerar cómo afectará este cambio a la capacidad de los bancos para prestar dinero. Aunque un estudio reciente del Banco de España no arrojó resultados estadísticamente significativos sobre la evolución de los márgenes de interés en España en comparación con otros países, hay indicios que sugieren que penaliza desproporcionadamente a los bancos que se centran en el crédito a las pymes», destaca la Comisión.

Carlos Cuerpo, ministro de Economía. (Foto: EP).

En definitiva, Bruselas no se muestra abiertamente en contra de este impuesto en el informe, pero sí destaca sus posibles efectos sobre el crédito principalmente a las pequeñas y medianas empresas y sí sugiere que se modifique en España como se ha hecho en Italia, citando expresamente el movimiento realizado por el Gobierno de Giorgia Meloni.

Meloni decidió rebajar las pretensiones del impuesto a la banca en el país, reduciendo la cantidad a pagar al fisco, y además dando la opción a la banca italiana de no pagar ese impuesto si se dedicaban esos fondos a mejorar los ratios de capital del banco. Una opción así cita la Comisión en su informe sobre España.

De hecho, el informe de Bruselas señala sobre los bancos españoles que «si bien se mantienen por encima de los requisitos de capital y las directrices supervisoras, los ratios de capital de los bancos españoles siguen siendo inferiores a los de sus homólogos de la UE y, junto con la evolución de la calidad crediticia en los trimestres siguientes, justifican un seguimiento continuo», advierte. Todo, alertando sobre los efectos de hacer permanente y de qué forma el impuesto a la banca.

E ministro español de Economía, Carlos Cuerpo, ha señalado que el Gobierno sigue dándole vueltas a qué hacer con el impuesto -una de las posibilidades es adaptarlo al ciclo de los tipos de interés- mientras las entidades bancarias mantienen su batalla legal contra la medida. Las entidades han perdido la primera pelea, la de la imposición de medidas cautelares, que fueron rechazadas por los tribunales españoles en septiembre de 2023, pero el proceso sobre el fondo del asunto sigue adelante.