Economía
Santander

Banco Santander elevará sus ingresos un 11% en 2023 hasta 57.660 millones, según los analistas

Banco Santander mejorará un 11% sus ingresos, según las primeras estimaciones de los analistas, y apunta a un beneficio superior a 10.000 millones

Las primeras estimaciones de los analistas que siguen la cotización del Banco Santander apuntan a que la entidad que preside Ana Botín elevará sus ingresos a cierre de 2023 un 11% hasta 57.660 millones de euros, lo que permitirá al banco registrar un beneficio neto superior a los 10.000 millones por primera vez en su historia. En 2022, el Banco Santander cerró el ejercicio con 9.605 millones de beneficios. El mercado espera que la entidad presente sus resultados anuales el próximo 31 de enero.

Para el último ejercicio fiscal del banco el consenso general de los analistas es que el beneficio por acción será de 0,633 euros, frente a los 0,539 euros del año 2022. El incremento para 2023 es de casi un 18%, ligeramente inferior al 23% que subió el año anterior. En concreto, 23 analistas del mercado confían en esta subida del beneficio por acción, mientras que 19 expertos cifran en 57.660 millones los ingresos del banco para 2023 -un año antes ascendió a 52.120 millones-.

En cuanto al cuarto trimestre del año, los analistas esperan un beneficio trimestral por acción del banco de 0,150 euros. En el mismo trimestre del año anterior, la empresa obtuvo un beneficio de 0,130 euros por acción.

En cuanto a las ventas, según cinco analistas, Santander habría registrado una media de 14.210 millones de euros en el último trimestre. Esto equivaldría a un aumento de las ventas del 5,06% en comparación con el año anterior. En aquel momento, Santander facturó 13.520 millones de euros.

Estas primeras estimaciones de los analistas confirman que Santander será el primer banco español que supere los 10.000 millones de euros de beneficio. Banco Santander es la única entidad sistémica del mundo para 2025, algo que ha sido ratificado en las últimas semanas por el Banco de España.

Entre el resto de bancos del país, que empiezan la próxima semana la ronda de presentación de resultados anuales, Caixabank será la entidad que más incremente sus beneficios, según el panel de analistas de la agencia Bloomberg, que podría acercarse a los 5.000 millones de ganancias. De confirmarse, aumentaría sus beneficios en más de un 50% sobre el año 2022.

La buena marcha de la banca -el otro gran banco, BBVA podría mejorar sus beneficios más de un 20% hasta rozar los 8.000 millones de euros-, se debe a la subida de los tipos de interés al 4,5% decretada por el Banco Central Europeo (BCE) en sucesivas reuniones para frenar la inflación.

Además, los grandes bancos no han cedido a las presiones del Gobierno y de la ex ministra de Economía, Nadia Calviño, para que remuneraran los depósitos, algo que sólo han hecho las entidades más pequeñas, lo que les ha permitido también cerrar un año de incrementos de los retornos.

Ana Botín, presidenta de Banco Santander

El gran problema para el sector en este 2024 será por un lado la posible bajada de los tipos de interés a partir del verano, y el impuesto a la banca impulsado por el Ejecutivo, que ha decidido además ahora hacer permanente.

De acuerdo con los expertos, el BCE deberá empezar a bajar los tipos de interés este año una vez controlada la inflación en la zona euro en cifras cercanas al 2%. JP Morgan espera que eso se produzca ya en el tercer trimestre del año, y que el banco europeo lo haga después de la Reserva Federal norteamericana. Como publicó este diario, Santander tiene previsto bajar aún más sus gastos para hacer frente a esta bajada de los tipos de interés y la consecuente reducción de márgenes.

El otro problema es el impuesto a la banca. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido hacer permanente este impuesto que grava un 4,8% los ingresos de las entidades. El impacto que tendrá para los bancos, según cálculos de los analistas, rondará entre el 8% y el 10% de los ingresos.

La banca ha pleiteado en los juzgados contra el Gobierno por este impuesto, algo que no ha logrado frenar que Sánchez lo convierta en permanente a partir del próximo año. Aún así, el sector espera que la justicia pueda dar marcha atrás a esta tasa que en el resto de la Unión Europea grava los beneficios y no los ingresos. Algo similar ha ocurrido en el sector energético, donde las eléctricas también han reclamado en los juzgados contra un impuesto que consideran ilegal.