Economía
Pretende relanzar el proyecto en el futuro

El as en la manga de Florentino: el Barcelona necesita ya el dinero del primer pago de la Superliga

El fondo Providence apoya la nueva competición

No habrá penalizaciones para los que han abandonado para que lo reconsideren pasado un tiempo

Laporta rompe su silencio: «La Superliga es una necesidad, pero decidirán los socios»

  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

La retirada de la mayoría de los clubes fundadores de la Superliga ha obligado a cancelar el proyecto de momento, pero su principal artífice, Florentino Pérez, pretende retomarlo en el futuro. Y para ello cuenta con un as en la manga: la desesperada situación económica del Barcelona, que necesita ingresar esta temporada los entre 200 y 300 millones de euros del primer pago que contempla el proyecto.

Así lo aseguran fuentes financieras, que añaden que la Superliga cuenta con el apoyo de algunos de los mayores fondos de inversión del mundo, como Providence, además del gigante CVC, aunque fuentes de este último en España matizan que hubo reuniones hace meses con la Superliga pero que no se concretó ningún acuerdo. El proyecto cuenta asimismo con el soporte económico de la banca JP Morgan. Este respaldo da fuerzas al presidente del Real Madrid para mantener viva la idea, y por eso no va a exigir las penalizaciones que deberían abonar los equipos que han saltado del barco. «La intención de Florentino es que lo reconsideren cuando se calmen las aguas», según las fuentes.

La complicada situación económica del Barcelona, que esta temporada registrará pérdidas de unos 350 millones después de perder otros 100 la pasada, hace que el club azulgrana necesite la inyección económica prometida por la Superliga cuanto antes; una inyección que no puede obtener por ninguna otra vía. «Hace tres años, cuando se planteó inicialmente el proyecto, el Barcelona no quería saber nada de él. Pero ahora no tiene más remedio que sumarse a él. Si no recibe ese dinero, no podrá hacer frente a muchos de los pagos de esta misma temporada».

Otra fuente explica que «Joan Laporta tiene dos problemas: necesita el adelanto de dinero que suponía entrar en la Superliga y no puede pagar la penalización que supondría marcharse», algo que de momento no va a exigir Pérez como se ha dicho. «Quiere seguir en la Superliga por si puede relanzar y cobrar el adelanto, o al menos hasta que objetivamente no dé más de sí para que no le puedan reclamar la penalización», añade.

De hecho, el presidente culé admitió este jueves que «la Superliga es una necesidad» y argumentó que los grandes clubes tienen derecho a tener más peso en el reparto de los recursos que generan. Por ello, mostró su confianza en que se pueda encontrar una fórmula que incremente sus ingresos y en la posibilidad de llegar a un acuerdo con la UEFA para ello.

Gran interés de fondos de inversión

El proyecto de la Superliga contempla que los clubes recibirán inicialmente un adelanto sobre los derechos futuros de la competición de entre 200 y 300 millones, que se financiarán con un crédito de 3.250 millones de JP Morgan. En teoría, deben destinar ese dinero a mejorar sus infraestructuras para la nueva competición, pero la realidad es que muchos, entre ellos el Barcelona, lo necesitan para cubrir las fuertes pérdidas que ha supuesto la pandemia (aunque en algunos casos ya venían de años anteriores).

Con el apoyo del Barcelona, Pérez tendrá mucha más fuerza para retomar el proyecto una vez que se apague el incendio provocado esta semana por el anuncio de la nueva competición. «La clave está en los clubes ingleses, que se han echado atrás ante el rechazo de sus aficionados y del Gobierno de Boris Johnson. Pero su terrible situación económica les va a obligar a reconsiderar su postura si no quieren acabar en la quiebra», explican las fuentes.

Además del crédito de JP Morgan, la Superliga cuenta con el interés de fondos de inversión que están dispuestos a invertir grandes cantidades por las altas expectativas de rentabilidad que genera el proyecto. Unas expectativas que comparte la Bolsa, donde clubes como el Manchester United o la Juventus subieron más del 10% el lunes tras el anuncio del lanzamiento y perdieron todo lo ganado el miércoles con la retirada masiva de los fundadores.

Un proyecto diseñado por Key Capital durante tres años

La Superliga no es un proyecto de una noche en la barra de un bar, como ha dicho el presidente de LaLiga, Javier Tebas, sino que lleva diseñándose más de tres años. El banco de inversión responsable de ello es el poco conocido Key Capital, una boutique financiera de Madrid propiedad de dos hombres de absoluta confianza de Pérez: Borja Prado, ex presidente de Endesa y de Mediobanca en España, y Anas Laghrari, un francés de origen marroquí con cuya familia tiene estrechos lazos de amistad el presidente blanco.

Key Capital ha estado detrás del diseño de algunas de las mayores operaciones corporativas de ACS, como la compra de Abertis junto a la italiana Atlantia en 2018. Y ahora también es el asesor principal de la oferta de 10.000 millones lanzada sobre Auostrade, la red de autopistas italiana propiedad también de la citada Atlantia (empresa controlada por la familia Benetton).

Precisamente, este viernes la compañía transalpina celebra un consejo de administración decisivo para la operación, ya que debe decidir si acepta que ACS puje por Autostrade contra una oferta respaldada por el Gobierno italiano. Su segundo accionista, el fondo TCI, se mostró ayer partidario de la oferta española.