Economía
de la mano de Cobra

Acciona puja por un proyecto ferroviario que unirá Dinamarca y Alemania por 200 millones

Acciona, de la mano de Cobra, puja por construir un ferrocarril que discurrirá por el túnel submarino de Fehmarnbelt, que conectará la isla danesa de Lolland con la alemana de Fehmarn, y cuyo presupuesto asciende a unos 200 millones de euros (1.500 millones de coronas danesas).

En concreto, Acciona y Cobra figuran en uno de los cuatro consorcios internacionales precalificados por Femern A/S, la autoridad danesa encargada de diseñar y planificar este enlace a través del mar Báltico, que dará lugar al túnel combinado de carretera y ferrocarril sumergido más largo del mundo.

En el marco de este concurso, por el que inicialmente se interesaron nueve grandes consorcios, también se encuentran precalificadas firmas de Austria, Alemania, Francia o Dinamarca.

Este proyecto ferroviario supone el último gran contrato para la construcción del túnel de Fehmarnbelt hacia Alemania, que transformará los viajes entre Europa Central y Escandinavia y que se asienta en una zanja en el fondo del mar Báltico a una profundidad de hasta 40 metros.

Femern A/S espera recibir las ofertas finales a mediados de 2024, de forma que el contrato se adjudique, como muy tarde, a principios de 2025 y arranque poco después.

El contrato comprende un sistema ferroviario de dos vías y catenaria que permitirá la circulación de los trenes a 200 km/hora, de los cuales 19 km están conectados al túnel y aproximadamente 6 km están fuera del mismo, en los lados danés y alemán.

Final de las obras en 2029

Cuando el túnel con su ferrocarril electrificado esté terminado en 2029, tras numerosos retrasos, será un «atajo» verde para el transporte de mercancías y pasajeros por ferrocarril a Europa con un tiempo de viaje de siete minutos a través de Fehmarnbelt. También permitirá ahorrar un desvío de 160 km.

«Nuestro objetivo es entregar un ferrocarril climáticamente neutral cuando esté en funcionamiento y contribuir a la transición ecológica del sector del transporte», ha indicado la directora de contratos de Femern A/S y responsable de las instalaciones ferroviarias, Kirsten Christensen.

De cara a la adjudicación final del proyecto, Femern A/S enfatizará el precio, los métodos y la organización para minimizar el riesgo en la ejecución y las soluciones, que deberán abordar unas condiciones desafiantes al tratarse de un túnel submarino.

El contratista también deberá cumplir unos objetivos de emisiones de CO2 durante el período de construcción.

Los trabajos del túnel, solución apoyada por una gran mayoría del parlamento danés en enero de 2011, están ya muy avanzados en ambos extremos (Rødbyhavn y Puttgarden) gracias al trabajo de cerca de 2.000 empleados.