Kylian Mbappé está liberado y desahogado desde que el pasado 15 de febrero se conoció su salida del Paris Saint-Germain el próximo verano y al día siguiente su fichaje por el Real Madrid, como anunció en primicia el director de OKDIARIO, Eduardo Inda. El ariete francés ha marcado siete goles en los siete partidos que ha disputado desde una fecha que supuso un antes y un después en su carrera deportiva.
Desde el anuncio de su marcha, el ‘7’ del PSG no ha jugado todos los minutos que solía por el propósito de Luis Enrique de acostumbrar a su plantilla a remar sin él de cara a la temporada que viene. Aun así, ha sido capaz de ver puerta hasta en siete ocasiones repartidas en los 426 minutos que estaba en el césped, es decir, va a gol cada 60 minutos.
Mbappé, que ya lleva 38 goles en la presente campaña y está muy cerca de pulverizar sus mejores números, ha enchufado el 18% de esas dianas a partir del momento en el que se supo su adiós al PSG a final de temporada después de siete años. Sus datos hacen que su futuro club, el Real Madrid, se frote las manos con un delantero de época que aterrizará en Valdebebas a partir del próximo 1 de julio, un día después de que finalice su contrato con el equipo de la capital de Francia.
Su último atracón de goles llegó el pasado domingo en la goleada del PSG al Montpellier fuera de casa. Los parisinos vencieron por 2-6 y Mbappé firmó su tercer hat trick de la temporada, tres tantos más a los cuatro que ya llevaba desde que este periódico avanzó su fichaje por el Real Madrid. El anterior se produjo justo en el encuentro anterior, cuando abrió la lata contra el Niza en el Parque de los Príncipes (3-1).
Luis Enrique y Mbappé
Antes, fue suplente y jugó 17 minutos contra el Stade de Reims y en el anterior puso fin a la aventura de la Real Sociedad en Champions con un doblete en el Reale Arena. Los dos encuentros anteriores fueron raro para él, pues en Mónaco Luis Enrique le sustituyó al descanso y contra el Rennes, en su vuelta a su estadio después del anuncio de su salida, sólo jugó 65 minutos. Por último, en su primera intervención tras el terremoto, ante el Nantes, marcó un gol en los 28 minutos que apareció en la segunda parte.
Por otro lado, su entrenador viene insistiendo desde ese mismo día en que el PSG debe ir para cuando no esté. Sin embargo, Mbappé ha encadenado dos titularidades seguidas y dos partidos completos, por lo que el discurso de Luis Enrique ha variado. «Tenemos que aprovecharlo mientras podamos y cuando ya no podamos aprovecharlo tendremos que subir nuestro nivel», dijo el técnico asturiano tras el choque contra el Montpellier.
Con la Ligue 1 en el bolsillo y en semifinales de la Copa de Francia, los motivos de ese aumento en los minutos de Mbappé no son otros que el buen panorama del PSG en la Champions. Tras eliminar a la Real, los parisinos cayeron emparejados con el Barcelona en el sorteo del pasado viernes y, de pasar de ronda, su rival estaría entre el ganador del enfrentamiento entre Atlético de Madrid y Borussia Dortmund.
Luis Enrique, que mide cada detalle, tiene claro que no puede bajar el ritmo competitivo de Mbappé de cara a las dos citas contra el Barça, en las que su equipo buscará meterse en una nueva semifinal y acercarse a un título que nunca ha conquistado y que desde hace unos años es el primer y único objetivo de la cúpula qatarí que preside Nasser Al-Khelaifi.
El jugador saca pecho
El propio Mbappé preguntó a los periodistas en su última rueda de prensa previa al Francia-Alemania de este sábado a las 21:00 horas si habían notado algún cambio en su rendimiento desde que se conoció de forma oficiosa su marcha del PSG. «¿Me has visto alterado en los últimos partidos?», cuestionó de manera irónica. «Me da igual lo que pase fuera del campo, estoy siempre centrado. Mi objetivo es jugar bien y rendir en los partidos, y lo he hecho», sentenció.
