Javier Tebas se ha visto obligado a camuflar su inquina hacia el Real Madrid y a frenar la cruzada con los horarios de la Liga, estableciendo su partido de la jornada 32 ante el Athletic Club en el único espacio posible, que es el domingo 20 de abril a las 21:00. Así, los blancos dispondrán de cuatro días de descanso desde el choque de vuelta de los cuartos de final de Champions contra el Arsenal, que al igual que el liguero será en el Santiago Bernabéu el miércoles a la misma hora.
El presidente de la Liga recibió un serio aviso por parte del club blanco en boca de su entrenador, Carlo Ancelotti, que comunicó en su rueda de prensa tras la victoria del Real Madrid en Villarreal que sus jugadores no se presentarían a ningún partido más al que llegarán habiendo descansado menos de 72 horas respecto al anterior.
De esta forma, Tebas, en esta ocasión de forma imperativa, ha tratado de camuflar sus decisiones, aunque bien es cierto que antes de la vuelta ante el Arsenal podía haberle concedido un día más de descanso a los blancos si hubiera fechado su encuentro contra el Deportivo Alavés en Vitoria el sábado 12 de abril en vez del domingo 13 a las 16:15 horas.
Tebas depende de la Copa
Aquí no quedaba otra, pues el Athletic también se juega la vuelta europea frente al Rangers 72 horas antes del duelo en el Bernabéu en San Mamés (jueves 17 de abril). Tebas, por lo tanto, ha fechado su partido contra el Real Madrid en el único horario posible, si es que el equipo blanco sigue vivo en la Copa del Rey. En el caso de que no, sí que podría desplazarlo al lunes de la siguiente semana, en la que también habrá jornada de Liga intersemanal antes de la final copera del sábado 26 en el estadio de La Cartuja de Sevilla.