El Real Madrid subió sus prestaciones contra el Betis. No bordaron el fútbol, pero sí hay que reconocer que tras tres partidos de Liga muy pobres, los blancos mostraron un nivel más aceptable. Eso sí, todavía tienen margen de mejora y Ancelotti tendrá por delante un parón de selecciones para trabajar más con su equipo que con los jugadores, ya que muchos están concentrados con sus respectivos países, para seguir ajustando a un equipo que debe seguir mejorando.
Ancelotti ha repetido en diferentes ocasiones que el problema estaba detectado y que llegaba el momento de encontrar solución. Por ejemplo, contra el Betis se vieron avances de entendimiento en ataque. Por primera vez, cada jugador atacó por su carril. Es decir, Rodrygo por la derecha, Vinicius por la izquierda y Mbappé por el centro. Pero todavía deben seguir creciendo para poder competir por todo en una temporada tremendamente exigente.
Ancelotti aprovechará este parón de selecciones para afianzar ideas y trabajar tácticamente, algo que en la vorágine de la competición se le complica notablemente. Es cierto que le van a faltar hasta 12 internacionales, mientras que tendrás las ausencias de Camavinga, Bellingham, Vallejo, Alaba, Mendy, Tchouaméni y Ceballos. No obstante, podrá trabajar junto a los suyos con la tranquilidad que no encuentra en el día a día.
De momento, Ancelotti ya consiguió contra el Betis que el compromiso defensivo subiese notablemente. Este era uno de los aspectos que más preocupaba al italiano y donde más hincapié ha puesto. Y es que, sin el compromiso de todos, atacantes y defensores, era imposible competir. «El bloque siempre lo ha sido y será la clave del éxito porque el último problema es marcar goles», afirmaba el italiano tras la victoria contra los andaluces.
Otro aspecto en el que trabajará en esta semana es en la colocación de sus futbolistas. Ancelotti es plenamente consciente de que se descolocan en algunas fases del partido, lo que complica notablemente el trabajo defensivo, mientras que hace mucho más lento y previsible el ofensivo. Con los que están y con los que irán llegando a medida que acaben de jugar con sus países, se enfocará en mejorar este aspecto tan importante.
El resto de aspectos bajo control
El resto está controlado. Físicamente, el equipo está bien. El trabajo que ha hecho Antonio Pintus durante el verano ha sido bueno. Es cierto que con gran parte del equipo no ha podido trabajar todo lo deseado, ya que se han incorporado más tarde, pero sí que los ha puesto en la mejor forma posible para competir. El principal deseo ahora es que todos regresen sanos de sus respectivas selecciones.
«Nunca viene bien porque te quita a los jugadores, sobre todo a los que viajan a Sudamérica, que les va a costar regresar bien. Lo único que pido es que no haya lesiones porque es el peligro más grande. Por lo demás, están bastante acostumbrados a jugar siempre», aseguró el italiano.
Por otro lado, el compromiso del equipo nunca se ha cuestionado. Todos van a una en un vestuario que es una auténtica familia. Ese problema nunca ha existido en el conjunto blanco. Lo que ha fallado se llama fútbol y una series de ajustes que poco a poco irán solucionando.