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La UEFA estudia apartarle del Manchester City-Inter de Milán

Marciniak podría quedarse sin la final de la Champions por asistir a un acto de extrema derecha

Szymon Marciniak podría perderse la final de la Champions League. El árbitro polaco ha sido el elegido por la UEFA para pitar el partido más importante del año, pero su designación puede dar un giro de 180 grados en las próximas horas. En Nyon estarían pensando en dejar al colegiado sin el premio que supondrá el encuentro entre Manchester City e Inter de Milán que se disputará en Estambul el próximo 10 de junio. El motivo sería su presencia en un acto organizado por la extrema derecha polaca, con posturas xenófobas, homofóbicas, racistas y antisemitas.

El colegiado polaco ha sido pillado en una manifestación llamada Everest, que fue organizada por Slawomir Mentzen, líder del partido ultra Konfederacia. Su presencia allí fue desvelada en tras un reportaje en la televisión de su país, pero la prensa italiana se ha hecho eco rápidamente. El escándalo habría llevado a la UEFA a estudiar el caso, que podría terminar con el cambio de designación para la final de la Champions League.

En la sede de la entidad que preside Aleksander Ceferin valoran ya la posibilidad de que haya cambios de cara al encuentro en el que el Manchester City de Pep Guardiola y el Inter de Milán de Simone Inzaghi buscarán llevarse la máxima competición y poner la guinda a la temporada de la mejor forma posible. La decisión se podría tomar este mismo viernes, tal y como apuntan desde el país transalpino.

El diario La Reppublica recoge en sus páginas lo sucedido. Hablan, además, de que el máximo organismo continental se encuentra investigando qué pasó y una posible sanción para el colegiado polaco: «El escándalo estalló en los medios polacos tras el reportaje de la asociación Never Again y la UEFA ha abierto una investigación sobre el asunto. En las próximas horas, confirma Nyon, se tomará una decisión, tras todas las investigaciones sobre el caso».

La UEFA se presenta como abanderada de la lucha contra la discriminación y uno de sus principales objetivos es el de erradicar la xenofobia y el racismo en el fútbol. Los ideales del partido que organizó la manifestación a la que acudió Marciniak van totalmente en contra de lo que defienden desde el ente continental, lo que le podría llevar a ser castigado sin arbitrar la final de la máxima competición.

Marciniak está considerado como uno de los mejores árbitros del mundo. De hecho, pitó la final del pasado Mundial de Qatar 2022 entre Argentina y Francia o la Supercopa de Europa que midió en 2018 al Real Madrid y al Atlético de Madrid. La de Estambul es su primera final de la Champions, aunque podría ver como finalmente se queda sin premio.