Deportes

El dilema de Ansu Fati

Ansu Fati debe decidir esta semana cómo afrontar su dilema con el menisco: suturarlo y estar cinco meses de baja o extirparlo y perderlo para siempre

A la media hora de partido ante el Betis, Jordi Alba veía la incursión de Ansu Fati en el área y le servía un balón de los que solo hay que empujar. Tras el canterano corrían Mandi y Bartra, el primero a su espalda y el segundo intentaba ir a su altura. Fue el central argelino el que se tiró al suelo para taponar el disparo del 17 pero lo que se encontró fue su tobillo. Fati se retorcía de dolor en el suelo y el colegiado pitaba la pena máxima que erraría Griezmann.

La imagen repetida muestra como Mandi fuerza la pierna de Ansu Fati con un mal gesto. Fueron tres o cuatro las vueltas sobre el césped que dio el canterano. Estuvo unos dos o tres minutos sobre el terreno de juego y necesitó de la asistencias médica, pero el internacional español pudo continuar. De hecho acabó la primera parte y dio alguna que otra carrera más. No fue hasta el descanso, cuando los médicos le hicieron la primera inspección en su rodilla cuando se llevaron las manos a la cabeza. Era el menisco interno de su pierna izquierda, estaba roto.

Sobre Ansu Fati y el FC Barcelona emerge ahora un gran dilema. No solo las cuestiones deportivas que conllevan la lesión del canterano, un fijo en los planes de Koeman pese a su juventud, factor de desequilibrio del equipo, que tendrá que parar unos meses, sino también qué hacer con ese menisco con un chico de tan solo 18 años. Solo tienen dos vías: suturar el menisco o extirparlo.

El tiempo es clave en estos momentos. En los próximos días el jugador, aconsejado por su entorno y evidentemente por el Barça, deberá tomar una decisión al respecto de cómo tratar su lesión, si optar por la vía conservadora o pasar por quirófano. Ambas tienen sus pros y sus contras, sus diferentes tiempos de baja, pero ninguna es la panacea. La lesión de menisco con tan solo 18 años es un contratiempo completamente inesperado con Ansu Fati.

La opción de suturar el menisco es la menos invasiva pero es con la que mayor tiempo de baja estaría Ansu Fati, unos cinco meses en el dique seco. Es la vía conservadora con el menisco, que no lo destroza y deja maltrecha la rodilla del joven futbolista. La otra vía, la que quizá deportivamente podría ayudar más al Barça, es la de extirparlo.

Extirpar la el menisco o la parte rota de éste dejaría la rodilla destrozada para siempre al jugador, pero podría llevarle de nuevo al verde en apenas cinco o seis semanas en el mejor de los casos. Aunque con esta vía, igual los problemas vuelven a reproducirse en unos pocos meses… o ya retirado.

Las expertos médicos, en casos como el de Ansu Fati y sus 18 años, aconsejan sí o sí optar por la vía de saturar el menisco. Extirparlo en tan temprana edad podría acarrear otros problemas en zonas más complejas y sin cicatrización como el cartílago articular de la rodilla.