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Antiviolencia pide multar al podemita Kichi con 1.500 euros por su «actitud chulesca» en el Carranza

La Subdelegación del Gobierno en Cádiz ha informado de que, a propuesta de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, instruye un expediente sancionador al alcalde podemita de Cádiz, José María González ‘Kichi’, tras el incidente ocurrido el pasado mes de mayo con un aficionado en el fondo sur del Estadio Carranza durante el encuentro Cádiz-Racing de Ferrol.

Dicha sanción podría acarrear al regidor una multa de 1.500 eurosEn un comunicado, la Subdelegación ha confirmado que está instruyendo dicho expediente después de los hechos ocurridos el pasado 21 de mayo en el Estadio Carranza pudieran constituir una posible infracción «leve» de la Ley 19/2007 de 11 de julio, Contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.

A la vista de dicha propuesta, la Subdelegación del Gobierno en Cádiz ha iniciado la instrucción de apertura del procedimiento sancionador, durante cuya tramitación «se dilucidarán los hechos, su posible tipificación como infracción y, en su caso, la sanción que correspondiera».

La Subdelegación ha aclarado que finalmente no se contemplará la prohibición de entrar en recintos deportivos dado que se trata de una autoridad pública y podría interferir en el desarrollo de su trabajo.

«Actitud chulesca» en un operativo policial

Los hechos se remontan al mes de mayo, cuando el Estadio Ramón de Carranza acogió el primer partido de la liguilla de play-off para el ascenso a Segunda División entre el Cádiz C.F. y el Racing de Ferrol. La Unión Federal de la Policía acusó al alcalde de tener una «actitud chulesca» al intentar mediar ante la expulsión de un aficionado por parte del operativo policial que se encontraba en el interior del estadio.

El alcalde podemita señaló en su día que el ejercicio de su labor de alcalde incluía también «el papel de mediador en todos los conflictos», dándose la circunstancia de que se produjo uno «a pocos metros» de donde él se encontraba viendo el partido en fondo sur. Por ello, explicó en su momento que lo que hizo fue «acercarse» e «interesarse» por lo que había ocurrido y quiso dejar claro que «no conocía a ninguna de las personas implicadas» y que «lo hubiera hecho con cualquier ciudadano».

El alcalde subrayó que lo que hizo fue «mediación, propiciar el diálogo» y «acercar a la mismísima puerta del estadio» a la persona que había sido expulsada por la Policía Nacional.