Alarma en el Real Madrid con la recaída de Varane

Aquiles, el héroe de la Guerra de Troya, era invulnerable en todo su cuerpo salvo en el talón. Raphael Varane, defensa del Real Madrid, tiene en las lesiones su particular talón de Aquiles como demostró ante el Alavés una vez más.

Corría el minuto 10 del citado partido cuando el francés sintió molestias en su muslo izquierdo, precisamente la misma zona en la que se había roto el pasado 22 de febrero. Las alarmas se encendían entonces en el Santiago Bernabéu con un jugador que ya ha sufrido multitud de dolencias con tan sólo 23 años.

Para esta definición existe una palabra en este sector como la de futbolista de cristal. La ‘operación abril’ ya está en curso y la baja de Varane puede debilitar la defensa en la fase fundamental de la temporada que dio inicio este domingo.

En las seis temporadas que lleva el natural de Lille en el Real Madrid, los 27 partidos que disputó en 2014-15 entre todas las competiciones es su plusmarca personal, lo que termina de convencer de las constantes lesiones que sufre desde su llegada.

La más dura la sufrió el 11 de mayo de 2013 frente al Espanyol, rompiéndose el menisco de su rodilla derecha. Hasta el 7 de agosto del mismo año no volvió a ejercitarse con sus compañeros pero tuvo que parar porque se le hinchaba, regresando a los terrenos de juego el 2 de octubre -casi cinco meses después- aunque en noviembre tuvo que iniciar un plan conservador para recuperarse de la articulación a mediados de curso de forma completa.

Un año para olvidar en las grandes citas

Raphael Varane es un jugador explosivo que se rompe con facilidad, muscularmente hablando. Además de la ya mencionada lesión grave de rodilla, sus problemas han ido derivados de las arrancadas que su velocidad que nos acostumbra a ver.

En el último año natural hasta esta fecha se ha perdido quizá los dos momentos más importantes para un futbolista profesional: la final de la Champions League y la Eurocopa.

Aquel 28 de mayo de 2016 no pudo estar en el once ni en el banquillo de los jugadores del Real Madrid que levantaron la Undécima, como tampoco pudo estar en la cita de Francia en la que además de disputarse en su país, también llegaron a la final. Todas estas le han impedido ser lo que sus condiciones le podrían dar, el mejor central del mundo.