El trucazo del tenedor para cortar perfectamente la cuña de queso

¿Sabes que existen más de 2.000 variedades de queso en todo el mundo? Se pueden clasificar según su origen, textura, materia grasa, etc. Lo cierto es que es un alimento muy socorrido a la hora de preparar un picoteo con amigos o familia. Y, para conseguir una buena presentación, el perfil @myrealfood_app ha compartido un truco muy sencillo en Instagram para cortar perfectamente una cuña de queso.

Cortar queso en cuñas como un profesional no es nada sencillo, sobre todo si se trata de uno de textura blanda. Pero con este truco puedes realizar un corte perfecto sin complicaciones. Simplemente tienes que hacer unas marcas con el tenedor y luego cortar las cuñas de queso. Así quedarán todas del mimo tamaño.

Como puedes comprobar, cortar perfectamente una cuña de queso no puede ser más fácil. Además, puedes cortar unos taquitos y calentarlos al microondas para tener unos deliciosos chips. Una propuesta muy interesante para sorprender a tus invitados. ¡Les encantará!

 

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¿Cómo conservar el queso?

Para disfrutar del sabor y la textura de este alimento en todo su esplendor, debes saber algunas cosas acerca de cómo conservarlo. Por lo general, los quesos de pasta dura se conservan más tiempo que los de pasta dura por una razón muy simple: contienen un menor porcentaje de agua, lo que hace que disminuya la proliferación de hongos y bacterias.

Cuando dejas el queso a temperatura ambiente, tiende a sudar, lo que hace que pierda grasas y, en consecuencia, cambie su textura y sabor. Por este motivo, los expertos recomiendan mantener el queso refrigerado. Los de pasta blanda deben estar a una temperatura de entre cuatro y ocho grados y los de pasta dura de entre ocho y quince grados.

A la hora de meterlo en la nevera, lo mejor es envolver el queso en papel film. Es muy importante que quede bien ajustado para evitar que se forme una cámara de aire entre el film y el queso. De lo contrario, si podrían crecer hongos y bacterias por la humedad que hay en el interior de la nevera.

Otra alternativa es un recipiente hermético, aunque no es recomendable para los quesos blandos porque pueden fermentar debido a la falta de oxígeno. En el caso de los quesos de pasta dura, hay que colocar un papel de cocina en el fondo para que absorba toda la humedad y el líquido que pueda soltar el queso.