Ni se te ocurra comértelo: si ves esto en los pimientos deshazte de ellos cuanto antes
Los pimientos son una excelente fuente de fibra, que proporciona sensación de saciedad y contribuye a prevenir el estreñimiento, además de ayudar a reducir el colesterol y controlar la glucemia, lo que beneficia a personas con diabetes. Asimismo, la capsaicina, presente en los pimientos picantes, posee propiedades antibióticas y analgésicas.
A esto hay que sumar que son una excelente fuente de antioxidantes, incluyendo vitamina C, E y otros carotenoides como la capsantina, que ayudan a neutralizar los radicales libres y proteger contra enfermedades cardiovasculares y enfermedades degenerativas. También presentan otros beneficios como la reducción del consumo de sal, y contienen minerales como el calcio, magnesio y fósforo, que son importantes para la salud ósea, muscular y del sistema nervioso.
¡Tira los pimientos si ves esto!
Evita comprar pimientos arrugados, ya que esto sugiere que llevan almacenados mucho tiempo, lo que puede resultar en una pérdida de nutrientes y sabor. Además, es importante desechar aquellos pimientos que presenten cortes o áreas blandas, ya que esto indica que están cerca de descomponerse. Una vez en casa, se recomienda guardarlos en la nevera y colocarlos en una bolsa de plástico para mantener su frescura por más tiempo.
En la nevera, los pimientos se pueden conservar hasta cinco días, pero al momento de cocinarlos, es crucial revisar el estado de su interior, incluso si parecen estar bien por fuera. Es posible que los cortes o arrugas se hayan extendido hacia el interior, dejando la parte interna blanda o acuosa. También puedes utilizar el olor como indicador para determinar si el pimiento está en mal estado, lo que implica una pérdida significativa de nutrientes y puede representar un riesgo para la salud.
Tipos
Los pimientos se presentan en una amplia variedad de colores y tipos. Por ejemplo, el pimiento California está disponible en rojo, verde o amarillo. Estos pimientos son ideales para rellenos debido a su forma cúbica y achatada.
Los famosos pimientos de Padrón son pequeños y verdes. Como sabemos, algunos son picantes y otros no. Por lo general, se suelen freír secos en la sartén o asar a la plancha, lo que los convierte en una opción popular para muchos platos.
Otra variedad destacada son los pimientos de piquillo, originarios de Navarra. Estos pimientos tienen una forma triangular y un tamaño pequeño. Se suelen envasar en latas de conserva y son perfectos para rellenar debido a su piel dura y poca carne.
Por otro lado, los pimientos italianos tienen una forma alargada y fina. Son versátiles y se pueden consumir tanto crudos como cocidos. Se utilizan en ensaladas para agregar textura crujiente o se fríen para obtener un sabor intenso.
Consejos de compra
A la hora de comprar pimientos, es importante seleccionar aquellos ejemplares que sean carnosos, duros, pesados en relación a su tamaño, muy firmes, con piel lisa y lustrosa, y libres de golpes o magulladuras. Las arrugas o manchas indican un almacenamiento prolongado, lo que resulta en una pérdida de nutrientes y sabor. Se deben evitar aquellos con piel fina o poco firme, así como los que presenten hendiduras, cortes o partes acuosas, ya que son signos de deterioro.
Cómo cocinarlos
Los pimientos son versátiles y se pueden ser consumir tanto crudos como cocidos. Las variedades alargadas y delgadas son ideales para freír, mientras que los más carnosos son excelentes para asar o rellenar. El método más saludable de cocción es el asado al horno, ya que evitará la absorción excesiva de aceite que ocurre al freírlos.
Agregar pimientos crudos y tiernos a las ensaladas es una excelente manera de aprovechar su contenido vitamínico, especialmente la vitamina C, que puede perderse durante la cocción. Es recomendable cortar los pimientos en trozos finos y masticarlos bien para facilitar su digestión.
Para aquellos con estómagos sensibles, la piel del pimiento puede resultar indigesta, por lo que es aconsejable retirarla. Esto se puede lograr asando el pimiento hasta que la piel se desprenda, luego sumergiéndolo en agua fría. Además, las semillas y las membranas del pimiento pueden tener un sabor amargo, por lo que también es preferible retirarlas.
Beneficios para la salud
Los pimientos son un alimento sumamente beneficioso para la salud, ofreciendo una amplia gama de ventajas. Gracias a su alto contenido en agua y bajo aporte calórico, son ideales para aquellos que buscan perder peso. Además, su acción antioxidante, proporcionada por los betacarotenos, las vitaminas E y C, ayuda a proteger las células del daño causado por los radicales libres, lo que puede prevenir enfermedades cardiovasculares.
Por otro lado, su efecto diurético, derivado de su contenido en potasio y baja presencia de sodio, los convierte en aliados para combatir la hipertensión y la retención de líquidos. Finalmente, los carotenoides que contienen son fundamentales para el cuidado de la vista, protegiendo los ojos del daño oxidativo y reduciendo el riesgo de enfermedades oculares.
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