Cultura

Todos los secretos del hombre que ha pagado 450 millones por un cuadro de Leonardo da Vici

El pasado 13 de noviembre el mundo del arte abarcó titulares en todos los periódicos mundiales. La obra de Leonardo da Vinci ‘Salvator Mundi’ se vendía en Christie´s NY por un precio récord: 450 millones de dólares barriendo todos los récords antiguos, modernos y contemporáneos previamente realizados tanto en subastas como en venta privada. Era la primera vez en la historia de la casa que se vendía una obra antigua en una venta contemporánea, uniendo así dos mercados que se rigen de forma diversa pero donde el cruce de gustos y compradores cada vez es mayor.

El mundo entero está expectante por saber quién fue el comprador, la política de las casas de subasta exige un impecable anonimato. Sin embargo, es cuestión de tiempo que el nombre del comprador de ´Salvator Mundi’ se haga público. La venta ha sido un despropósito donde Christie’s se ha embolsado la friolera de 50 millones de dólares por la venta del cuadro. El alto resultado ha sido fruto del irrefutable marketing de Christies ante la única obra de Leonardo en manos privadas. De los casi 20 cuadros que se conoce que hizo en vida, éste en concreto perteneció a tres reyes diferentes, cuenta con una considerable restauración y la solemnidad de la imagen es notablemente soberbia: Cristo como Salvador del Mundo.

Las pujas duraron 20 minutos, siendo los incrementos entre 2 y 5 millones de dólares hasta que se llegó a 370 y el comprador ya «cansado» decidió subir la puja 30 millones más para asegurarse el trofeo y desbancar a todos sus contrincantes.  Esto nos indica que el comprador es más posible que sea una persona privada que una institución, ya que una institución no es muy probable que suba en una puja por 30 millones. Sin embargo, se baraja el Louvre de Abu Dabi como uno de los compradores, así como alguna institución en China, siendo ‘Salvator Mundi’ la única obra de Leonardo en China y en Asia. Las obras de Da Vinci se encuentran principalmente en Museos en Italia. Estados Unidos cuenta con una en The National Gallery en Washington, por lo que también se baraja que el comprador sea americano con la idea de donar la obra a un museo. Esto tendría mucho sentido para un billonario americano, ya que las donaciones a museos ofrecen grandes desgravaciones fiscales. De los grandes magnates americanos, se ha hablado de Bill Gates, al ser el dueño de uno de los códices de Leonardo.

Personalmente me cuesta creer que alguien tan involucrado en labores filantrópicas invierta esta cifra en una obra de arte. También se ha hablado de Jeff Bezos, lo cual tiene sentido ya que es considerado el hombre más rico del mundo con una fortuna de 95 billones de dólares y solamente por las desgravaciones fiscales que puede obtener al donar la obra a un museo la operación le puede ser hasta rentable. Por último, se ha hablado de dos fondos de inversión que lo han comprado juntamente con la idea de prestarlo a museos. En cualquier caso, el comprador pasara a la historia porque lo que hizo no fue solamente una adquisición, sino una inflexión socioeconómica en el mundo del arte, posibilitada por un nivel obsceno de desigualdad de riqueza. Por eso la obra ha sido tan cuestionada en su valoración, atribución y restauración. Una sola persona ha hecho historia y ha cambiado la dinámica del mercado del arte.