Roban el monumento ciclista de 300 kilos de peso del Xorret de Catí y Mazón anuncia que lo repondrá

• Ignacio Martínez
• ALICANTE
• Responsable de OKDIARIO en la Comunidad Valenciana
• • 19/05/2023 11:01
  • Actualizado: 19/05/2023 11:01

El famoso monumento al ciclista que corona el Xorret de Catí, en Alicante, obra del escultor Vicente Ferrero, en bronce y de nada menos que 300 kilos de peso, ha sido robado. Así, lo ha denunciado en su perfil de twitter el presidente de la Diputación de Alicante Carlos Mazón, que ha anticipado que esta singular escultura será repuesta.

El Xorret de Catí, conocido en el mundo ciclista como la cima de los Jiménez, por los triunfos allí en diferentes etapas de distintas ediciones de la Vuelta a España del Chaba Jiménez y Eladio Jiménez es lugar de peregrinaje de cicloturistas, senderistas y escolares a lo largo de todo el año. En este 2023 es, también, punto de llegada de la Vuelta, la más importante y universal ronda ciclista española.

Ha sido el propio presidente de la institución provincial, Carlos Mazón, quien este viernes, en su perfil de twitter, ha denunciado el robo con el siguiente mensaje: «Amigos de lo ajeno se llevan al ciclista en bronce del escultor Vicente Ferrero que llevaba desde 2003 en Xorret de Catí, donde finaliza una de las etapas de la Vuelta este año en Alicante. Volveremos a ponerlo».

La escultura data del año 2003, bajo la presidencia de la Diputación de Alicante, entonces, del popular Julio de España. El monumento simboliza el esfuerzo de los ciclistas al culminar un trayecto de apenas cuatro kilómetros, pero que es reconocido por los esforzados corredores como uno de los más duros con que se han encontrado en sus carreras profesionales.

La fama del lugar y de su escultura se ha universalizado y es punto de referencia de miles de aficionados al ciclismo. Tanto en España como en el extranjero.

El monumento al ciclista en bronce que hasta ahora coronaba el Xorret de Catí asemeja a El Gigante, que corona la cima del mítico Tourmalet. Obra esta última de Octave Lapize en 1910. El Gigante se retira cada invierno. Pero, una vez repuesto, sirve para que los esforzados cicloturistas den testimonio de que han llegado a la cima, fografiándose junto a la citada escultura, algo que también ocurría con el monumento al ciclista del Xorret de Catí.

 Según ha informado Onda Cero, para el robo han tenido que ser utilizadas herramientas especializadas para retirar la fijación de la base y un camión pluma para su transporte. Se da la circunstancia de que el robo ha coincidido con el Día Internacional del Museo.