Comunidad Valenciana
INMERSIÓN LINGÜÍSTICA

PP y Vox fulminan otro ‘procés’ en Elche: «Nadie podrá ser discriminado por la lengua que use»

El nuevo reglamento rompe con la obligación de rotular calles y comercios sólo en valenciano

Acaba también con la obligación de los funcionarios municipales de dirigirse a los ilicitanos inicialmente en valenciano

El Pleno del Ayuntamiento de Elche, la tercera ciudad de la Comunidad Valenciana, ha aprobado este lunes, con los votos del Gobierno Local: PP y Vox, el inicio del denominado Reglamento de Cooficialidad Lingüística. Estará vigente antes de que acabe el año. De facto, este reglamento incorpora al castellano como lengua histórica de la ciudad, condición que desde 1997 hasta ahora sólo ostentaba el valenciano. Y supone el fin de un largo procés, como evidencia su artículo 2, donde se especifica que: «Nadie podrá ser discriminado por la lengua que use».

El nuevo reglamento, «garantiza el derecho de los ciudadanos a dirigirse al Ayuntamiento, oralmente y por escrito, en cualquiera de las dos lenguas oficiales de la Comunidad Valenciana, y a obtener respuesta en la lengua utilizada», en su artículo 4.

Esta nueva normativa del Ayuntamiento de Elche se pone en marcha apenas 72 horas antes de que las Cortes Valencianas aprueben la Ley de Libertad Educativa, también de PP y Vox. Esta norma es la que desmonta oficialmente el procés acelerado a la valenciana, en materia de educación.

En la actualidad existe en Elche un reglamento de normalización lingüística que sostiene que el valenciano es la lengua históricamente propia de Elche e incluye medidas como que los acuerdos del Consistorio, las convocatorias, órdenes del día y actas de los órganos colegiados tienen que realizarse, preferentemente, en esa lengua.

El viejo reglamento: calles y rótulos sólo en valenciano

Pero, además, obliga a los funcionarios  dirigirse al público inicialmente el valenciano y luego pasar a la lengua empleada por el interlocutor o que los anuncios del Ayuntamiento en medios de comunicación tienen que ser mayoritariamente en valenciano.

Ese reglamento obligaba también a que todos los topónimos y nombres de calles debían estar únicamente en valenciano y que la rotulación de los edificios municipales y rótulos de la vía pública también debían ser, únicamente, en valenciano.

El nuevo reglamento: se utilizarán las dos lenguas

Frente a ello, el reglamento de PP y Vox dispone que los documentos municipales se redactarán en las dos lenguas, que los acuerdos aprobados por órganos de gobierno del Ayuntamiento que deban ser objeto de publicación se harán también en las dos lenguas salvo que por razones de especial urgencia sólo sea posible hacerlo en una de ellas.

Y, sobre todo, que los topónimos y denominaciones de calles y espacios públicos serán en castellano y valenciano, salvo en los casos en que la denominación histórica se haya expresado tradicionalmente a lo largo del tiempo en una sola de las dos lenguas. Además, los anuncios e informaciones oficiales en medios de comunicación y redes sociales se publicarán en las dos lenguas. Ahora, el nuevo reglamento arranca una tramitación de unos cinco meses.