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Hallazgo colosal: investigadores descubren un material que desaliniza el agua del mar sin gastar energía

La necesidad de encontrar métodos más eficientes para el acceso al agua dulce cobró relevancia en un contexto donde millones de personas conviven con limitaciones de suministro. Hoy, más de 300 millones de habitantes en todo el mundo dependen de algún tipo de tecnología que desaliniza el agua del mar para cubrir sus necesidades básicas.

Sin embargo, la mayoría de estos procesos requiere una gran cantidad de energía, instalaciones técnicas complejas y recursos económicos. La comunidad científica centró parte de sus esfuerzos para desarrollar mecanismos que reduzcan esta dependencia. Gracias a esto, hoy nos topamos con una solución completamente distinta, cuya aplicación no exige mucho.

¿Cuál es el material que desaliniza el agua del mar sin gastar energía?

Investigadores de la Universidad Politécnica de Hong Kong han desarrollado un nuevo tipo de aerogel que desaliniza el agua del mar sin gasto energético. El trabajo fue publicado en la revista ACS Energy Letters, especializada en avances energéticos sostenibles.

La pieza clave de este sistema es un material rígido de aspecto poroso, fabricado mediante una técnica de impresión 3D capa a capa sobre una base congelada. Está compuesto por nanotubos de carbono y nanofibras de celulosa, materiales que permiten la creación de pequeños canales verticales de apenas 20 micrómetros.

Estos canales favorecen la evaporación del agua marina al concentrar la energía solar directamente en el interior del material. En las pruebas realizadas, el aerogel fue colocado dentro de un recipiente con agua del mar, cubierto con una tapa plástica transparente.

La radiación solar calentó la estructura, provocando la evaporación del líquido. La sal quedó en el fondo del recipiente, mientras que el vapor se condensó en la tapa y fue recolectado en forma de gotas mediante un embudo.

Tras seis horas de exposición directa al sol, el sistema logró obtener unas tres cucharadas de agua dulce. Aunque el volumen es modesto, el experimento demostró que el rendimiento no se ve afectado por el tamaño del material, lo que permite su ampliación para un uso más intensivo sin pérdida de eficacia.

Bajo coste, escalabilidad y utilidad en zonas rurales: las ventajas de este descubrimiento

El sistema fue concebido con un enfoque sencillo. Solo se necesitan tres elementos para su funcionamiento:

No se requieren conexiones a redes eléctricas, componentes electrónicos ni mantenimiento especializado. Esto lo convierte en una opción viable para zonas costeras, comunidades rurales o entornos con infraestructuras limitadas. También representa una alternativa útil en contextos de emergencia o ayuda humanitaria.

Además de su facilidad de uso, su fabricación es económica. No se necesitan materiales difíciles de obtener ni maquinaria industrial. Todo el proceso está basado en componentes básicos y tecnologías accesibles.

El investigador principal, Xi Shen, señaló: «Nuestro aerogel permite una desalinización de máxima capacidad en cualquier escala, lo que ofrece una solución sencilla y ampliable para producir agua limpia sin energía».

¿Cómo se desaliniza el agua del mar tradicionalmente y en la actualidad?

Frente a este sistema pasivo, las plantas desalinizadoras convencionales utilizan métodos como la ósmosis inversa. Esta técnica, aunque eficiente, consume grandes cantidades de energía y necesita personal técnico cualificado.

En Hong Kong, por ejemplo, se ha puesto en marcha un complejo que procesa 340 millones de litros diarios de agua marina, de los cuales 135 millones se transforman en agua dulce.

La planta usa paneles solares para reducir el consumo de energía de la red eléctrica en un 16,2%. También se implementaron sistemas de recolección de agua de lluvia y dispositivos de ahorro que permiten reducir el uso de agua fresca en un 53%. A pesar de estos esfuerzos, el impacto ambiental y económico sigue siendo considerable.

Por contraste, el sistema basado en aerogel no genera residuos tóxicos ni requiere infraestructura pesada. Su rendimiento puede adaptarse a las condiciones locales sin perder eficacia, lo que lo convierte en una alternativa real para pequeños asentamientos.

Perspectivas de implementación global de este descubrimiento hongkonés

El potencial del material no se limita a aplicaciones individuales. Su escalabilidad y simplicidad permiten pensar en estructuras más grandes para su uso comunitario. El hecho de que su rendimiento no dependa de un tamaño específico facilita su diseño modular, adaptable a diversas necesidades y contextos.

Además, no está condicionado por los cambios climáticos que afectan a otras fuentes hídricas. Mientras haya luz solar, el proceso puede desarrollarse de forma continua y sin interrupciones.

De esta forma, el sistema no sólo desaliniza el agua del mar, sino que también lo hace con independencia energética total.