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Masaje perineal en el embarazo: por qué debes hacerlo y cómo

Prepárate para el parto fortaleciendo el tono, la elasticidad, la fuerza y ​​la flexibilidad de los tejidos musculares del perineo. 

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Con el pasar de las semanas de embarazo y con los cambios en el cuerpo que son cada vez más evidentes y significativos, es importante prepararse mejor para el evento del parto . Un evento muy delicado que implica un gran estrés para el cuerpo de la mujer y que puede ser manejado a través de diferentes técnicas. Una de ellas es el masaje perineal que nos servirá para fortalecer el suelo pélvico. Veamos cuándo hacer y de qué modo.

Masaje perineal en el embarazo

EL masaje perineal en el embarazo tiene que ver con la práctica de dedicar un tiempo en las semanas previas al parto a masajear el suelo pélvico , con el objetivo de preparar esta parte del cuerpo para los esfuerzos que sufrirá. tienen que sufrir durante el parto.

Así que tratemos de entender mejor qué masaje perineal hacer durante el embarazo, cuándo puedes empezar a hacerlo, cuáles son los beneficios y, al mismo tiempo, qué aspectos considerar para no cometer errores.

Masaje perineal: ¿cuándo se realiza?

Comencemos recordando que se entiende por perineo esa parte del cuerpo que va desde la vagina hasta el ano . Es una zona muy importante y delicada ya que está formada por tejidos blandos como músculos, ligamentos y tendones y que se encarga de proteger los órganos internos y reducir la incidencia de fuerzas provocadas por los movimientos corporales.

Entre las funciones del perineo también está la de permitir caminar en posición erguida , sostener el intestino y la vejiga (y por lo tanto las funciones de micción y expulsión de las heces) y los órganos reproductores. Esto en condiciones normales; durante el embarazo las presiones ejercidas por el aumento de volumen del útero resultante del crecimiento del bebé hacen que el perineo esté más estresado.

Sin embargo, el parto es el momento en el que el perineo y el suelo pélvico corren mayor riesgo de sufrir eventos traumáticos, por lo que los masajes y ejercicios de fortalecimiento , como los ejercicios de Kegel , resultan fundamentales.

La indicación de los obstetras que recomiendan el masaje perineal en el embarazo es comenzar a practicarlo a partir del tercer trimestre , aproximadamente a partir de la semana 34 de gestación , para luego ir aumentando de intensidad en las siguientes semanas, las más cercanas al parto. Es un masaje que no lleva más de diez minutos realizarlo al menos un par de veces a la semana. Se puede realizar tanto de forma independiente como con la ayuda de tu pareja.

Los beneficios del masaje perineal en el embarazo

Como hemos visto, la zona del perineo está sometida constantemente a tensiones que aumentan con el paso de las semanas de embarazo. El descenso al canal del parto y los típicos empujones del parto, exponen la zona del perineo a una serie de tensiones.

Esta zona, de hecho, se estira y estira por el paso del niño, afectando la elasticidad de los tejidos tanto de los músculos como de la piel externa . El masaje perineal en el embarazo, por tanto, tiene como objetivo mejorar el tono, la elasticidad, la fuerza y ​​la flexibilidad de los tejidos musculares de esta zona, para facilitar el paso del bebé y al mismo tiempo prevenir y reducir el riesgo de traumatismos durante el parto .

Entre estos, el más común es el vinculado a las laceraciones durante el parto vaginal, pero también para evitar recurrir a la episiotomía (el corte que se hace para facilitar la salida del niño) y para hacer frente a un prolapso de útero o recto.

Además, el masaje perineal mejora la continencia, mejora la circulación y permite mantener relaciones sexuales menos dolorosas y molestas en mujeres que puedan quejarse de una afección de este tipo.

Cómo hacer un masaje perineal en el embarazo

La ejecución del masaje perineal es de por sí muy sencilla, pero requiere un cuidado , atención y preparación particulares. Lo primero que debe hacer es estar preparado para el masaje, sabiendo cómo hacerlo correctamente sin ejercer demasiada presión que podría ser contraproducente y dolorosa.

Posteriormente es fundamental cuidar la higiene de manos y que la persona que realiza el masaje tenga las uñas cortas para no dañar una zona muy sensible y delicada. Para facilitar el masaje recomendamos el uso de aceites no perfumados que permitan tanto facilitar el movimiento de los dedos como hidratar los tejidos del suelo pélvico.

Existen lubricantes específicos para este tipo de masaje, la indicación es utilizar aquellos a base de vitamina E, almendras y aceite de oliva. Se deben evitar los de base acuosa (aceites artificiales y minerales) y preferir los vegetales.

La preparación para el masaje perineal también consiste en lavar la zona del suelo pélvico con agua caliente (a la que, si es necesario, añadir sales perfumadas) con el fin de relajar los músculos y prepararlos para la estimulación manual . También existen diferentes posiciones para realizar el masaje perineal, desde sentado hasta acostado; lo importante es que te encuentres cómoda, relajada y en una posición en la que puedas realizar el masaje con total serenidad.

Para algunas mujeres puede ser conveniente usar un espejo para monitorear cómo están realizando el masaje o usar almohadas para encontrar una posición cómoda y relajada.

El masaje perineal a realizar durante el embarazo se realiza con la yema de los dedos, generalmente los pulgares, pero también con el índice o el dedo corazón o con dos dedos. Una vez aplicado el aceite o gel en los dedos utilizados en el masaje, proceder con movimientos circulares en la zona de la vagina y los labios mayores, ejerciendo una ligera presión en dirección al intestino, manteniendo la palma de la mano descansando sobre la cara interna del muslo.

Posteriormente, se introduce el pulgar en la vagina hasta palpar la pared vaginal posterior, intentando (siempre ligera) una presión hacia el exterior. Con el pulgar (o el dedo que se utilice) dentro de la vagina, realizar movimientos circulares en forma de media luna, con el objetivo de estirar los tejidos, prestando siempre la máxima atención a la respiración . Ahora empuja el perineo hacia abajo con el pulgar. Si es necesario, vuelve a aplicar más lubricante para continuar con el masaje.

Masaje perineal: ¿hay alguna contraindicación?

No existen contraindicaciones para el masaje perineal durante el embarazo, pero debe evitarse en presencia de una infección vaginal . También es fundamental, como ya se ha dicho, realizarlo con conciencia y atención; de lo contrario, la consulta de una matrona o un especialista siempre es útil para evitar consecuencias desagradables.

En todos los casos, ante la presencia de dolor, ardor u otras molestias , siempre es necesario interrumpir y eventualmente contactar con su médico o matrona para que le oriente en la correcta práctica del masaje.