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Cómo hacer arena cinética con los niños durante el confinamiento en casa

Para hacer arena cinética casera con la que los niños puedan jugar y hacer castllos dentro de casa, bastará mezclar un poco de harina, almidón y aceite.

¿Conoces la arena cinética? Esta es un tipo de arena muy popular entre los niños que puede servirnos en estos días de confinamiento para que realicen todo tipo de manualidades, y de paso, que no echen tanto de menos salir a jugar con la arena del parque o de la playa. Veamos entonces, cómo hacer arena cinética con los niños durante el confinamiento en casa.

Gracias a la arena cinética, los niños pueden incluso construir castillos aunque tengan que estar dentro de casa y aunque este tipo de arena está compuesta generalmente de un 98% de arena natural y un 2% de un polímero no tóxico, que hace que sea maleable, podemos intentar hacerla a partir de tres ingredientes naturales que te van a dar muy buen resultado.

Cómo hacer arena cinética con los niños durante el confinamiento en casa

Fácil de manejar y dar forma , se descompone como la arena clásica, pero también se puede cortar como una pasta, de modo que para conseguir algo parecido, puedes preparar esta receta que ahora te explicamos

Pasado ese tiempo, los niños ya podrán comenzar a jugar con su arena cinética casera. No será evidentemente igual a la que venden en Amazon o en jugueterías, pero no tendrán problema alguno para manipularla o si lo prefieren hacer una masa compacta a partir de la creada y darle forma para obtener  pequeñas formas o estructuras como un castillo.

Beneficios de la arena cinética

Gracias a este tipo de arena que hemos hecho en cas, el niño podrá desarrollar su sensibilidad táctil y pensamiento creativo, pero también puede servir de ayuda a los niños para expandir su vocabulario y sus habilidades lingüísticas. La interacción con sus hermanos y adultos durante la manipulación de la arena cinética le permite al niño desarrollar vocabulario y expandir el lenguaje, desarrollando así sus habilidades cognitivas.

De hecho, aplastarla, apretarla o presionarla con las manos desnudas o con alguna herramienta sirve para estimular la fuerza de las manos y así obtener beneficios. Además, también estimula la actividad sensorial y es una verdadera cura para todos aquellos que no son particularmente sensibles a los estímulos táctiles. Por lo tanto, es perfecta para niños con trastornos sensoriales , especialmente táctiles , e incluso si el niño no quiere tocar la arena con las manos desnudas, puede hacerlo con algunas herramientas, como una cuchara, y luego acercarse gradualmente y ganar confianza, aunque si mojáis un poco la arena que acabáis de hacer, comprobareis como el niño la nota más suave cuando la coge y poco a poco se le irá secando mientras la manipula de modo que apenas notará el cambio y seguirá jugando con ella sin problema.