El PSOE reclama que el 8M sea un día de lucha en Baleares y Vox se desmarca de los actos institucionales
Vox: "No vamos a hablar en nombre de las mujeres ni a victimizarlas, vamos a trabajar para solventar sus problemas"
PSOE: "Es muy preocupante que la ultraderecha impida la lectura de una declaración institucional"
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La diputada de Vox en el Parlament balear Idoia Ribas ha anunciado este lunes que su formación no se sumará a los actos institucionales de este 8M y ha asegurado que trabajará «por los problemas reales de las mujeres». Mientras, la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Pilar Costa, ha pedido que el 8 de marzo sea «un día de lucha para una reivindicación que debe ser permanente» y ha lamentado que, una vez más, la cámara autonómica no pueda leer una Declaración Institucional en apoyo a ese día por culpa del veto de la ultraderecha.
Por su parte, la diputada de Vox Idoia Ribas ha insistido en elaborar una nueva ley de violencia intrafamiliar o suprimir entidades públicas feministas para dedicar los fondos a ayudas a las mujeres maltratadas, entre otras propuestas. «Vox ha llegado para dar la batalla cultural. Este 8 de marzo no vamos a hablar en nombre de las mujeres ni a victimizarlas, vamos a trabajar para solventar sus problemas reales», ha dicho.
La diputada ha reclamado «asegurar la protección, igualdad y presunción de inocencia de todos». «Defendemos el aumento de penas para los agresores sexuales, algo que la izquierda hipócrita rechaza», ha destacado.
En este sentido, Ribas ha lamentado que «la izquierda tumba sistemáticamente todas las iniciativas para investigar el caso de las menores tuteladas prostituidas». «Cuando se abusa de una persona, niñas y niños en este caso, las víctimas tienen todo el derecho a que se investigue hasta el final para dar con los responsables y que se establezcan las responsabilidades al nivel administrativo y judicial», ha concluido.
Por su parte, el grupo municipal Vox Palma tampoco no se ha adherido a la declaración institucional para este 8 de marzo propuesta por el Ayuntamiento de Palma, informa Europa Press.
La portavoz y regidora de Vox, Sandra Barceló, ha explicado que su formación rechaza «la desigualdad y la discriminación que la izquierda ha convertido en dogma indiscutible que vincula a las mujeres como antaño, en sinónimo de debilidad y de inferioridad».
«En nuestro partido creemos firmemente en que las mujeres somos libres, capaces e independientes, y no permitimos que se nos colectivice o victimice, como tampoco permitimos que ningún chiringuito feminista nos diga cómo debemos pensar», ha apuntado.
Desde el PSOE, la portavoz Pilar Costa, ha explicado que su partido se sumarán a la lectura de un manifiesto, antes de pleno, con motivo del 8 de marzo. Al mismo tiempo, ha considerado «muy preocupante» que, de nuevo, «la ultraderecha impida leer una Declaración Institucional en defensa de la igualdad real entre hombres y mujeres».
El PSOE, Vox y el PP
Además, la socialista ha destacado que esta semana, en la Comisión de Asuntos Sociales del Parlament, los socialistas llevarán a debate y votación una iniciativa para promover acciones de difusión, prevención y sensibilización de la violencia de género en mujeres más mayores de 65 años. «Queremos visibilizar un problema real que sufren las mujeres mayores de 65 años, que probablemente hayan sufrido toda su vida», ha detallado Costa.
Costa también ha mostrado su preocupación por el «de cada vez más evidente acercamiento de la ultraderecha y el PP, únicos compañeros de viaje». La socialista, en este sentido, ha alertado de que «nos preocupa y debemos ir alerta de que esto no suponga el blanqueo del PP», justamente en un momento en que la formación está en un proceso de renovación de su dirección y «viendo qué puede ocurrir en Castilla y León con la entrada de la ultraderecha en un gobierno autonómico».
Con todo, Costa ha insistido en que «todo lo que está pasando en el conjunto de España, especialmente en la Comunidad de Madrid, demuestra que el PP es el mismo partido de siempre, que pueden cambiar las caras, pero no el fondo de sus políticas», y que esto no puede suponer «blanquear la corrupción, que es lo que siempre ha perseguido en el PP».