El PSOE balear destina 5,2 millones a chiringuitos independentistas que promocionan el catalán

Los socialistas de Baleares destinarán en 2022, a través del Govern balear y Consell de Mallorca (equivalente a las diputaciones), las dos principales administraciones de las Islas presididas ambas por el PSOE, un total de 5,2 millones de euros a la promoción de entidades del separatismo catalanista en las Islas. 

Un riego millonario a chiringuitos independentistas, en plena crisis económica, para la promoción de la lengua catalana que supera, en 680.000 euros, el montante destinado el presente año a la financiación de estos colectivos, que son los verdaderos receptores de esos fondos para la imposición del monolingüismo de esta lengua en Baleares. 

Desde la Obra Cultural Balear, al colectivo Paraula, Plataforma per la Llengua, medios de comunicación en catalán o Joves per la Llengua, entre otros. En este último caso, además, a dedo mediante convenio, desde el Consell de Mallorca presidido por la socialista, Catalina Cladera. 

El montante global previsto en 2022 para el impulso a estos colectivos separatistas, supera con creces lo que el Ejecutivo balear, presidido por, Francina Armengol, ha destinado este año, por ejemplo, a ayudar al asfixiado pequeño comercio (3,5 millones);  casi quintuplica los 1,2 millones del programa de becas para jóvenes desempleados, está muy por encima del importe de las subvenciones del Govern para formar personal de investigación (1,5 millones) o del dinero que la Consellería de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través del Fondo de Garantía Agraria y Pesquera (FOGAIBA), otorga para la formación de jóvenes que se quieran hacer un hueco en la casi extinguida agricultura balear (3,5 millones). 

Las subvenciones a los chiringuitos catalanistas es una constante desde 2015, cuando los socialistas aterrizaron en el gobierno de las principales administraciones de las Islas en coalición con los independentistas de Més per Mallorca y populistas de Unidas Podemos (UP).

Ese mismo año, impusieron el catalán como requisito para acceder a la función pública, rematado esta legislatura, con la creación de la denominada Oficina de Derechos Lingüísticos. Un organismo creado por Armengol para perseguir a los empleados públicos que usen el castellano en la atención al público, a través de una simple denuncia.   

En 2022 el Ejecutivo balear destinará, en concreto, 3.402.162 euros a promocionar el catalán (400.000 más que en 2021) y el Consell de Mallorca, 1.827.801 (278.359 euros más que este año).

A estas cantidades, hay que añadir los 164.000 euros que el Ayuntamiento de Palma, también presidido por el alcalde socialista, José Hila, destinará el próximo año a la misma finalidad, tras la creación de una oficina de dinamización lingüística del catalán. Otro departamento  en manos de los nacionalistas de Més per Mallorca, como sucede con la totalidad de las direcciones generales de Política Lingüística del resto de administraciones de Baleares. 

Sin ir más lejos, la directora general de Política Lingüística del Govern balear es una ex candidata de Esquerra Republicana, Beatriu Defior.