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El PP y la izquierda aprueban las ayudas del Consell a entidades catalanistas con el voto en contra de Vox

Vox rechaza su concesión "a unos colectivos que fueron cómplices del golpe del 1-0 "

Los separatistas de Més tienden la mano al PP para seguir la política lingüística de los últimos años

  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El gobierno del PP de Mallorca se apoya en los partidos de la oposición de la izquierda, socialistas, independentistas de Més y los regionalistas del PI, para sacar adelante la concesión de subvenciones a diversas entidades para el fomento del catalán, algunas de ellas de carácter independentista. Es el caso de la Obra Cultural Balear (35.000 euros), Joves per la Llengua (45.000) o la Asociación de Escritores en Lengua Catalana (16.000), colectivos que el pasado domingo, organizaron una concentración en Palma contra la libre elección de lengua del Govern de Marga Prohens.

Vox que gobierna en coalición con el PP, rechazó su concesión porque en palabras de su portavoz insular, Antoni Gili, la promoción de la lengua catalana esta siendo utilizada por estas entidades para «fragmentar a la sociedad mallorquina utilizando fondos públicos para actividades que lejos de unir dividen a la población» recordando además su «participación como cómplices voluntarios del golpe de Estado del 1 de octubre en Cataluña, lo que revela su inclinación a favorecer agendas políticas que van más allá de la promoción lingüística».

Desde las filas de los independentistas de Més per Mallorca el conseller no ejecutivo, Joan Llodrà, pese a votar a favor de la concesión de estas subvenciones, reprochó al PP la «falta de diálogo» con la oposición en el Consell de Mallorca, y ha tendido la mano para llegar a acuerdos y continuar con la política lingüística de los últimos años.

Llodrà ha lamentado que la oposición no haya recibido «ningún gesto» desde las filas del PP. «Habría estado bien, ya que no tenían los votos para aprobar las ayudas», ha dicho.

Durante el debate, Llodrà ha ironizado con el «papel» de Vox en «el éxito de la manifestación masiva del pasado fin de semana a favor del catalán». Un éxito al que, según el conseller separatista, «también ha contribuido la familia Borbón».

Igualmente, ha criticado las «reiteradas controversias» entre PP y Vox, refiriéndose a que en las últimas horas el Consell ha comenzado a utilizar el castellano en las redes sociales de la institución. Un hecho del que «sacaba pecho la formación ultra». Sin embargo, han asegurado que tras la crítica de Més las publicaciones se han retirado. «Una humillación tras otra», ha apostillado Llodrà.

El portavoz separatista en el Consell, Jaume Alzamora, había censurado este hecho a través de sus redes sociales y había interpelado al presidente insular, Llorenç Galmés, si la decisión era de PP o de Vox y si la introducción del castellano «era la respuesta después de la manifestación masiva del domingo». «Mallorca no merece estar en manos de los ultras que sólo buscan alterar la convivencia y esparcir el odio», señaló.

La vicepresidenta de Cultura y Patrimonio del PP, Antònia Roca, ha incidido en que el gobierno insular continúa «defendiendo la cultura y la lengua, en consonancia con el Estatuto de Autonomía porque las dos lenguas nos enriquecen». «Nuestra defensa del catalán es firme y cristalina y este gobierno no hará ningún recorte», ha afirmado el portavoz adjunto del PP, Bernat Vallori.

Desde las filas de Vox, Gili finalmente quiso dejar claro al PP que el voto negativo de su formación a la concesión de estas subvenciones, «no refleja una deslealtad institucional, sino un compromiso férreo con nuestros votantes dado que no apoyamos la imposición del catalán como lengua vehicular, especialmente, teniendo en cuenta que a diferencia de nuestra Constitución, sometida a sufragio, el Estatuto de Baleares que incluye el catalán nunca ha pasado por las urnas».

Por último, el dirigente insular de Vox ha criticado el hecho de que estas entidades de apoyo al catalán «sólo dependan de subvenciones públicas actuando como verdaderos demandantes ah hoc de estos fondos, lo cual es inaceptable para una gestión transparente».