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Una fiesta ecuatoriana en un bar del barrio de Pere Garau en Palma acaba a puñetazos

La Policía Local tuvo que intervenir en una riña tumultuaria con varios heridos de diversa consideración

Dos mujeres fueron atendidas por personal sanitario por heridas sangrantes

  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

Una fiesta ecuatoriana en un bar del barrio de Pere Garau en Palma acaba a puñetazos y con varias personas heridas de diversa consideración. Los hechos tuvieron lugar sobre las 12.40 horas del pasado 7 de abril, cuando varias dotaciones de la Unidad de Seguridad Integral de la Policía Local de Palma tuvieron que intervenir un bar en las inmediaciones de la peatonalizada calle Nuredduna en el barrio de Pere Garau, tras recibirse numerosas llamadas por una riña tumultuaria.

Al llegar al lugar, los agentes observaron una gran cantidad de sangre en el suelo y solicitaron asistencia sanitaria para atender a los heridos.

Testigos e implicados, de nacionalidad ecuatoriana y en torno a los 40 años, relataron que se encontraban celebrando una fiesta privada cuando un hombre, en estado de embriaguez, accedió al local. Tras ser invitado a salir, este reaccionó de forma violenta contra los presentes, dirigiéndose de manera ofensiva hacia una de las mujeres y llegando a tocarle las nalgas.

Dos mujeres más fueron atendidas por personal sanitario por heridas sangrantes de diversa consideración. Una de ellas fue trasladada a un centro médico para continuar las curas.

El presunto autor del altercado declaró haber sido agredido por un individuo al estar hablando con quien podría ser su pareja. Según su versión, más personas se unieron a la pelea, viéndose obligado a defenderse. Las lesiones que observaron los efectivos policiales se localizaron en el rostro, cuello y brazos, así como heridas en los nudillos de sus manos. Portaba además la camiseta desgarrada en su totalidad, presentando manchas de sangre en pantalón, camiseta y zapatos.

Al no obedecer las instrucciones de los policías y no mantenerse alejado de la otra parte implicada, y por temor a que su estado de agitación y nerviosismo reactivara el conflicto, los agentes debieron contener al individuo y apartarlo por seguridad. El hombre, que presentaba un fuerte olor a alcohol, balbuceaba y emitía frases sin sentido. Finalmente, se negó a ser asistido por los servicios sanitarios y abandonó el lugar.

Ante las versiones contradictorias, los agentes informaron a las partes de la elaboración de un informe judicial, así como la obligación de comparecer ante la autoridad judicial al ser requeridos y del procedimiento a seguir para denunciar los hechos.

También en materia de sucesos, un hombre y su hija serán juzgados este martes (10.00 horas) en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Baleares por, presuntamente, haber apuñalado y pegado varias veces con un bate de béisbol a un familiar tras una discusión.

Según el escrito de acusación, los hechos ocurrieron el 25 de noviembre de 2019, sobre las 19.30 horas, en Manacor (Mallorca), donde la procesada se encontró con su tío paterno, con el mantuvo una discusión por problemas familiares.

Minutos más tarde, la mujer y su padre, también encausado, se dirigieron a una parada de bus en la que estaba la víctima y, al localizarle, la chica refirió a su padre frases del estilo Ahí está, vamos a matarlo.

Acto seguido, continúa el fiscal, el acusado comenzó a golpear en la cabeza y la cara a su hermano con un bate de béisbol que llevaba consigo, mientras que la mujer le asestó varias puñaladas por la espalda, gritando al mismo tiempo Dale más fuerte o Mátalo, mátalo. Al ver que estaban captando la atención de la gente, ambos agresores salieron huyendo del lugar.

A raíz de la agresión, el familiar sufrió diversas lesiones de distinta consideración.

Los hechos, para el Ministerio Público, son constitutivos de un delito de homicidio en grado de tentativa, y pide por ello ocho años de cárcel para la mujer y, para su padre, nueve años y medio de prisión.