Andalucía
Entrevista

Paco Mena (plataforma antidroga): «Hay interés en que el Campo de Gibraltar esté afectado por el narco»

"Algún día nos enteraremos por qué se desmanteló el OCON Sur con tanta prisa"

"De nada sirve hacer grandes operaciones policiales sin una justicia justa y rápida"

Con Marruecos a 14 kilómetros, Andalucía es la puerta de entrada del hachís a Europa. En 2023 se avistaron 471 narcolanchas y se incautaron 173 toneladas de esta droga, lejos de las 375 requisadas en 2021. Según la Memoria de la Fiscalía General del Estado, el «descenso de las investigaciones» contra las mafias se produce en parte por «la menor presión policial tras el desmantelamiento de OCON Sur», la unidad de élite de la Guardia Civil que durante cuatro años puso en jaque al narco.

Paco Mena lleva casi 35 años al frente de la plataforma antidroga Alternativas en el Campo de Gibraltar, territorio narco. Es una de las voces más autorizadas en este tema: «Muchas veces nos preguntamos por qué hay esa dejadez y ese interés en que el Campo de Gibraltar siga siempre afectado por el narcotráfico». En esta entrevista con OKDIARIO Andalucía enumera las reivindicaciones de su plataforma y deja una duda en el aire: «Algún día nos enteraremos por qué se desmanteló el OCON con tanta prisa».

PREGUNTA.- ¿Cuál es la función de su plataforma antidroga?

RESPUESTA.- Nosotros somos la Coordinadora Alternativas de lucha contra la droga en el Campo de Gibraltar. Nace en el año 90 y trabaja para la prevención y la lucha contra el narcotráfico. Nuestro trabajo diario, más allá de la repercusión pública de nuestras declaraciones, se centra en los centros educativos, con menores de Primaria y Secundaria, en la inserción laboral, montando ludotecas y centros de ocio, y en intentar educar a nuestros jóvenes, nuestros adolescentes y nuestros menores para que tengan una vida mejor y más sana.

P.- ¿De qué forma está presente el narcotráfico en el día a día del Campo de Gibraltar?

R.- El narcotráfico está muy poco presente en el día a día. A pesar de todo lo que se publica en los medios de comunicación, la gente que se ve afectada directamente por el narcotráfico es una muy pequeña parte de la población del Campo de Gibraltar. Son lugares muy concretos, barriadas muy concretas.

Incautación de 9,5 toneladas de cocaína en el puerto de Algeciras en agosto de 2023. (Foto: Efe)

P.- La Fiscalía dice en su última Memoria que algunas causas están prescribiendo porque los juzgados de la provincia de Cádiz están «desbordados». ¿Cree que la falta de medios para impartir una justicia rápida está dando alas a los narcos?

R.- Sin duda alguna. Coincidimos totalmente. La Fiscalía de Cádiz hace siempre un informe anual sin paños calientes, poniendo el dedo sobre la llaga. Y es la realidad. De nada nos sirve hacer grandes operaciones policiales si luego no tenemos una justicia justa y rápida. De eso se favorecen los narcos para eludir la acción de la justicia, porque pueden prescribir causas. El juzgado de Barbate, que lleva el asesinato de los dos guardias civiles, archivó una causa de narcotráfico porque llevaba 12 años instruyéndose. Y esto ocurre porque, primero, el propio modelo judicial lo favorece. Municipios como La Línea o San Roque, con una afección muy importante al narcotráfico, tienen juzgados mixtos, que atienden cuestiones civiles y penales. Y cuando cae una causa con muchos detenidos y muchas intervenciones telefónicas, paraliza prácticamente todo el juzgado. Y los abogados contratados por el narcotráfico lo saben. Empiezan a hacer recursos y peticiones y logran que el juez tenga que abandonar prácticamente el resto de causas y dedicarse en vida a eso, perjudicando a la parte civil, a un ciudadano que se quiere divorciar o que tiene un problema con el vecino. Esas causas tardan años. En estos juzgados sobrecargados de trabajo hay que nombrar un juez de refuerzo para que el juez titular se dedique plenamente a la causa de narcotráfico, que es muy compleja. Pero también hay que aumentar el número de funcionarios. De nada sirve que yo tenga dos jueces si luego no tengo esos funcionarios que transcriben toda la documentación. Y ahí tienen que jugar un papel muy importante las dos administraciones. El Ministerio de Justicia, que es el que puede nombrar los jueces de refuerzo, y la Junta de Andalucía, que es la que pone a los funcionarios en el juzgado.

P.- Ya hay juzgados especializados en violencia de género, en menores, en temas mercantiles…

R.- Efectivamente. Hace más de 30 años, cuando todavía no había juzgados especializados en menores ni en violencia de género nosotros ya estábamos solicitando esta figura. Puede ser interesante a modo de plan piloto, a ver cómo funciona. Pero políticamente nadie ha querido impulsarla. Han pasado dos gobiernos del Partido Socialista y dos del Partido Popular y ninguno ha querido hacernos caso. Esta figura no habría que aplicarla en toda España, simplemente en ciertas provincias con condiciones muy determinadas, como pueden ser las provincias de Cádiz, Málaga, Huelva, las rías gallegas, Madrid, Barcelona y Valencia. En Cuenca o en Guadalajara no tiene sentido. Ni en Badajoz. Si la justicia se ha ido especializando en temas tan sensibles como la violencia de género, lo mercantil o lo social, ¿por qué no tenemos juzgados especializados en narcotráfico? En las fuerzas de seguridad del Estado ya hay unidades especializadas en narcotráfico. También la Fiscalía tiene la Fiscalía Antidroga. Especialicemos un juzgado en narcotráfico y démosle funcionarios y medios tecnológicos para que puedan hacer un buen trabajo.

P.- España es ya un país sobresaturado de funcionarios. ¿Sobran políticos y faltan jueces y fiscales?

Bueno, creo que sobrar no sobra nadie en este país. Lo que sí faltan son funcionarios en la parte policial y judicial. Y más en el Campo de Gibraltar. Esta batalla es muy desigual. El narcotráfico se reinventa todos los días. Tienen tiempo, medios y dinero para intentar buscar cualquier resquicio legal donde se puedan beneficiar. La única forma de contrarrestar esto es con más medios tecnológicos y humanos, y sobre todo, atacando donde más les duele: el blanqueo de capitales. Si los que se están enriqueciendo con el narcotráfico son detenidos y no lo pierden todo, les sale a cuenta el negocio. No sirve de nada. Ahora, si además de cumplir condenas, cuando salen de prisión se ven sin propiedades, sin vehículos, sin lujos… Ésa es la piedra angular de la lucha directa contra el narcotráfico.

Narcolancha interceptada en una operación contra el tráfico de hachís. (Foto: EP)

P.- ¿Por qué cuesta tanto castigar penalmente prácticas como el petaqueo o las defraudaciones de fluido eléctrico vinculadas al tráfico de drogas?

R.- No lo entendemos. Lo del petaqueo [llevar gasolina y víveres a las narcolanchas en alta mar] lo reclamamos por primera vez hace cinco años. Lo pidió la Guardia Civil y ya lo está haciendo la Fiscalía. Nosotros no queremos que metan en la cárcel a un joven que lleva una garrafa de gasolina de 20 litros. No. Pero los que acumulan miles de litros de gasolina para abastecer a las narcolanchas y los guardan en locales comerciales y en viviendas, y los transportan en carreteras poniendo en peligro al resto de vecinos… Eso no puede quedar en una sanción administrativa. No vale de nada. Ni las pagan. Tiene que haber una sanción penal, que sepan que son cadena del narcotráfico y están colaborando, que sientan que lo que están haciendo les puede llevar a la cárcel. Eso es fundamental. Pero esta petición la empezamos a hacer con el Gobierno de Mariano Rajoy. Se fue y llegó el Gobierno de Pedro Sánchez, que parece que sí que lo va a estudiar, pero es que aquí en este país se tarda mucho en estudiarlo todo. Le pongo un ejemplo: la prohibición de las narcolanchas nos costó 20 años. Hicimos la petición cuando Gibraltar las prohibió en lo que ellos llaman sus aguas territoriales, cuando el contrabando de tabaco. Gibraltar cogió, fue al puerto y con una grúa las sacó y las incautó todas. Nosotros hemos tardado 20 años en hacer lo mismo [en España se prohibieron en 2018]. No entendemos por qué hay tanta resistencia a cambiar ciertas cosas. Nos cuesta la misma vida cambiar lo más mínimo. Por ejemplo, el río Guadarranque. Nos costó 15 años que vallaran el río. Y era un coladero para el narcotráfico, su base logística. Muchas veces nos preguntamos por qué hay esa dejadez, por qué hay ese interés en que el Campo de Gibraltar siga siempre afectado por el narcotráfico. Ésa es la pregunta que nos hacemos los vecinos del Campo de Gibraltar. Sabiendo que mientras que Marruecos esté ahí enfrente, el Campo de Gibraltar, por cercanía, va a ser el lugar principal para introducir la droga. Por tanto, hagamos cosas diferentes a lo hecho hasta ahora para intentar conseguir resultados diferentes.

Garrafas con gasolina para narcolanchas incautadas en Jerez.

Llevamos mucho tiempo solicitando un plan integral para el Campo de Gibraltar. Esto no se resuelve sólo con Policía y metiendo gente en la cárcel. No nos equivoquemos. Esa receta ya la conocemos y durante 40 años no ha funcionado y no funcionará jamás. Tenemos que intentar que nuestros jóvenes no vean en el narcotráfico una forma de vida. Jóvenes que viven en barriadas humildes, donde hay mucha pobreza, mucho paro, mucha exclusión social y la única oportunidad que tienen es entrar en el narcotráfico. Inviertan en infraestructura, en educación, en formación, en empleo, y démosles oportunidades para que el Campo de Gibraltar merezca la pena. El Campo de Gibraltar no es un erial. Tenemos el puerto más importante del Mediterráneo [el de Algeciras], el polígono industrial más importante de Andalucía [en Los Barrios] y somos cabecera de Andalucía en exportaciones.

P.- ¿Por qué cree que Interior decidió desmantelar el OCON Sur, que estaba haciendo un gran trabajo contra el narco? ¿Cree que hay intereses ocultos detrás de esa decisión?

R.- No, no creo que haya un interés oculto. Cuando se filtra que Interior va a desmantelar el OCON, la única organización que salió a decir que no estaba de acuerdo fuimos nosotros. Ni partidos políticos ni sindicatos de la Guardia Civi ni administraciones. Aquí nadie dijo nada. Consideramos que fue un error y se hizo precipitadamente. Creo que algún día nos enteraremos por qué se desmanteló el OCON con tanta prisa. Argumentaron que esos agentes iban a seguir trabajando en el narcotráfico. Sí, es verdad, pero entre los 150 efectivos que tenía el OCON había agentes que venían de Madrid y de Sevilla y que estaban en comisión de servicio. Y al final los que se incorporaron en la zona del Campo de Gibraltar eran los que venían del Campo de Gibraltar. Fue un error. No obstante, voy a seguir defendiendo el trabajo espectacular que hacen día a día la UDYCO [Unidad de Droga y Crimen Organizado] y el GRECO [Grupos de Respuesta Especial para el Crimen Organizado] de la Policía Nacional, el EDOA [Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga] de la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera. Pero restar medios favorece al narcotráfico. De todas maneras, la presión policial que se ha ejercido en los últimos años sobre el Campo de Gibraltar ha contaminado otras partes de la provincia. Ahora mismo hay más actividad en la entrada del Guadalquivir que en el propio Campo de Gibraltar. Las organizaciones son las mismas, pero buscan lugares con menos riesgos.

Narcolancha en la desembocadura del río Guadalquivir. (Foto: CNP)

P.- Dice que algún día nos enteraremos de lo que pasó con el OCON Sur. ¿Tiene alguna sospecha?

R.- No, no. Sospecha ninguna. Simplemente que me pareció que se llevó a cabo con excesiva rapidez. Se podía haber hecho de una manera mucho más ordenada. Decidimos desmantelarla, vale, vamos a ir reduciendo el número de agentes, vamos a terminar las operaciones. Pero aquello fue: hoy te lo digo y en un mes te lo desmantelo. Además, había dinero en la partida presupuestaria del Plan Especial de Seguridad para el Campo Gibraltar. No era un problema de dinero. Habrá que preguntárselo a la Dirección General de la Guardia Civil, a ver si algún día lo explica.

P.- La Fiscalía también ha alertado de la «proliferación escandalosa» de narcolanchas y la menor «presión policial» desde que Marlaska desmanteló la unidad, pero esta semana el presidente del TSJA negó «dejadez» y habló incluso de un incremento de plantilla.

R.- Primero, una cosa que le quiero aclarar. La transcripción que hizo la agencia que dio la noticia de la Fiscalía es errónea. La Fiscalía lo que dice es que hay un número muy importantes de narcolanchas acumuladas, que es diferente al incremento de narcolanchas. Las narcolanchas se están incautando y, como ya no pueden salir a subasta, se llevan a depósitos judiciales. Y lo que es peor, están en el puerto de Algeciras, que aquello parece el tercer mundo. Y a lo a que hace mención la Fiscalía es a eso.

Narcolanchas incautadas apiladas en el puerto de Algeciras.

De todas maneras, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Lorenzo del Río, a quien conocemos porque fue presidente de la Audiencia Provincial de Cádiz durante muchos años, lógicamente va a defender el trabajo de las fuerzas de seguridad del Estado y de la Judicatura. Pero aquí la realidad que tenemos es que el narcotráfico se reinventa todos los días y busca siempre los resquicios legales. Y ha visto que donde puede intentar eludir la acción de la justicia es mediante la vía judicial. Porque ven que los juzgados están saturados y son un embudo. Y en el proceso de instrucción recurren cualquier auto del juez una y otra vez, piden pruebas, contrapruebas… Intentan dilatar en el tiempo el proceso de instrucción porque luego las condenas van a tener que reducirse por dilación indebida. Se debe fortalecer la justicia y las dos administraciones que tienen competencias en ella, el Ministerio y la Consejería, deben sentarse en una mesa con lealtad institucional, con lo que nosotros llamamos el espíritu de Doñana, y no jugar a poner la pelota en el tejado del oponente, que es lo único que hacen. Yo no hago esto pero es que tú no haces aquello. No. Vamos a sentarnos y vamos a ver qué podemos hacer cada uno. Y una figura que nuestra organización y los sindicatos llevamos tiempo demandando es la Zona de Especial Singularidad para primar y premiar a agentes, jueces, fiscales y funcionarios judiciales, porque en esta zona ponen más en peligro su vida y hay mucho más trabajo. Vamos a compensarlo como se hace en el País Vasco. Oiga, que yo no quiero que se lo quiten, pero si todavía lo tienen allí, ¿por qué no lo implantan aquí?

P.- ¿Que valoración hace del caso Barbate?

R.- Yo siempre dije en todas las entrevistas que antes o después al piloto de la lancha lo veríamos sentado delante de un juez. Simplemente teníamos que tener paciencia. Con la inmediatez que funcionan el mundo y los medios de comunicación se ejerce una presión que no es buena. Creo que se ha hecho un buen trabajo por parte de las fuerzas de seguridad del Estado y creo que fue un trabajo diplomático con Marruecos por una sencilla razón: Marruecos no puede extraditar a ningún ciudadano marroquí porque su Constitución no se lo permite. Por lo tanto, este señor vino y se entregó voluntariamente. Se ha ejercido una presión en su entorno. Ahora lo más importante es que se siente en el banquillo, porque esto va a aliviar y dar paz a los familiares de los dos asesinados, y que ayude a localizar a los tres que lo acompañaban.

Karim El Baqqali, detenido el 19 de septiembre por el asesinato de dos guardias civiles en Barbate.

P.- La Audiencia de Cádiz juzga desde esta semana a 22 acusados del clan del Messi del hachís. ¿Puede servir para sentar precedente y mandar un mensaje a los narcos?

R.- La sala que lo está juzgando es la Sección Séptima del Campo de Gibraltar, que es el tribunal que más casos de narcotráfico juzga en España. Confiamos plenamente en su experiencia y en que haya una sentencia ejemplar que mande un mensaje al mundo del narco: antes o después, acabaréis sentados en el banquillo delante de un juez y acabaréis en prisión. Sabemos de las dificultades de este tipo de juicios. Las defensas ya pidieron el lunes la nulidad de las intervenciones telefónicas. Es lo primero que han hecho. Y la sala suspendió la vista oral para dilucidar la petición. Estas peticiones se hacen no para que se tengan en cuenta en primera instancia, sino para que cuando el caso acabe en el Supremo pueda considerarse que se han vulnerado los derechos de los acusados. Es una estrategia habitual de los abogados especializados en temas de narcotráfico.

Juicio contra los acusados de pertenecer al clan del Messi del hachís. (Foto: EP)

Creo que la sala está trabajando bastante bien. Confío plenamente en el estrado de la sala y sobre todo en la fiscal antidroga Macarena Arroyo, que hace unas peticiones extraordinarias. Lo único triste de todo esto es que el máximo presunto responsable de esa organización se encuentra fugado en Marruecos. Pero vamos a tener paciencia. Algún día lo veremos sentado delante del mismo tribunal.