Andalucía

Jiménez-Becerril, víctima de ETA, acusa a Sánchez de «cobarde y ruin» por su «afinidad» con Bildu

La hermana de Alberto Jiménez-Becerril (PP) -teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevilla asesinado por ETA en 1998 junto a su esposa, Ascensión García Ortiz- y diputada nacional del PP por Sevilla, Teresa Jiménez-Becerril, ha recriminado al Gobierno de Sánchez e Iglesias su estrategia para sacar adelante los PGE: «Buscan cambiar presos por Presupuestos».

En declaraciones a Canal Sur Televisión, recogidas por Europa Press, la diputada popular se pronunciado sobre el posible apoyo de Bildu a los PGE del Gobierno de Pedro Sánchez, al que señala como «ruin y cobarde» por sentarse a negociar con un partido que debería de estar «ilegalizado».

Jiménez-Becerril ha lamentado la estrategia del Gobierno: «Ellos sabrán, y allá ellos con su conciencia y lo que piensen de ellos los españoles. No es que no puedan rechazar sus votos, es que, de hecho, los buscan». Denuncia además la «afinidad» del Ejecutivo central con el partido heredero de ETA: «Siempre hay más opciones que elegir a un partido que no condena los asesinatos de 846 españoles inocentes».

Eso «dice mucho», según ha opinado Teresa Jiménez-Becerril antes de aseverar que «esto es blanco y en botella, es presos por Presupuestos, es una negociación clarísima que nos va a salir muy caro no sólo a las víctimas» directas de ETA, «sino a todos los españoles, que somos víctimas» de dicha banda terrorista, según ha añadido.

Además, la diputada del PP y víctima de ETA ha denunciado que desde el Gobierno «nos quieren callar, pero callados no nos van a tener», y ha querido dejar claro que aunque Podemos «tiene mucha más afinidad» con Bildu que el PSOE, Pedro Sánchez «está haciendo lo mismo» que su vicepresidente segundo del Gobierno, cuando él tiene «más responsabilidad» como jefe del Ejecutivo, y ella se dirige directamente al «presidente de todos los españoles».

Ha opinado también que el hecho de que el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, «tenga que escribir una carta de cuatro folios» para «explicar» dentro de su partido «el pacto con Bildu quiere decir que es algo inexplicable», y ahora los socialistas «no saben cómo salir» de esta situación.

«Hay muchos socialistas avergonzados»

En ese sentido, Jiménez-Becerril ha remarcado que la vicesecretaria general del PSOE y portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Adriana Lastra, «se reunió» con representantes de dicho partido, y el vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, «ha dicho» que el citado partido vasco se situaba «en la dirección del Estado».

Al respecto, la representante del PP ha tildado de «muy preocupante que un terrorista como Arnaldo Otegui», líder de Bildu, «esté en la dirección del Estado», y ha llamado la atención acerca de que «el mismo día que Iglesias dijo eso fue el que acertaron a los asesinos de Alberto y Ascen» a cárceles más próximas al País Vasco.

En esa línea, ha apuntado que «hay muchísimos socialistas que no están contentos, que están avergonzados» de esa cercanía de su partido con Bildu, y en ese sentido ha querido dejar claro que ella no dice «que los socialistas sean malos, sino que su presidente ha hecho una elección muy cobarde y ruin».

Ilegalización de Bildu

Jiménez-Becerril ha insistido en reclamar a los representantes de Bildu «que condenen el terrorismo de ETA, el asesinato de Alberto y Ascen, que nunca lo han condenado», y en criticar que desde el Gobierno «están pactando con un partido que no condena los asesinatos» de dicha organización. Ha opinado que algo así sería «impensable» en otros países occidentales como Francia o Estados Unidos.

Tras sostener que desde el Gobierno deberían pedir «a los etarras que acercan, progresan de grado o excarcelan» que colaboren con la justicia, porque «hay más de 370 crímenes de ETA sin resolver y ellos lo saben», también ha opinado que «debía haber habido una ilegalización» de Bildu, cuyos diputados «no deberían estar sentados en el mismo sitio donde estoy sentada yo».

«Creo que un partido que no condena los asesinatos de ETA no puede estar sentado en un parlamento democrático, porque ellos no son un partido democrático», ha resumido Teresa Jiménez-Becerril.