Los guardias civiles piden «apoyo militar» para encarar la «inasumible oleada» de narcopateras en Almería
La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) en Almería ha denunciado este martes que la situación derivada de las «oleadas» de pateras con inmigrantes ilegales que llegan al litoral provincial se ha tornado «inasumible». «Pedimos auxilio porque estamos desbordados», alertan. Los agentes demandan «apoyo militar» y «humanitario», ya que mientras las mafias mejoran su infraestructura, los medios de la Benemérita «están para un museo».
El secretario provincial de la AUGC, Víctor Vega, ha apuntado que las embarcaciones llegadas en las últimas horas a los municipios de El Ejido y Adra (Almería) son tipo «narcopatera», con «hasta cuatro motores de 300 CV y con una capacidad de navegación de más de 30 nudos», por lo que «ninguna de las actuales patrulleras» con las que cuenta el Servicio Marítimo de la Guardia Civil es «capaz» de darles alcance.
«Tras la pandemia hemos detectado que ha cambiado la forma de actuar de las mafias y ahora son llegadas en tipo oleada, entendida como el desembarco de más de 100 personas, por lo que resulta imposible», ha subrayado Vega, remarcando la falta de dotación de las unidades territoriales para hacer frente a esta avalancha.
El secretario provincial de AUGC ha trasladado que esta «incapacidad» la están «sufriendo» desde hace «más de tres años», a lo que se suma el «cuello de botella» del centro temporal de atención a extranjeros (CATE) del puerto de Almería, que no puede «absorber a más de 100 inmigrantes, lo que en muchas ocasiones obliga a derivarlos a Murcia», ha explicado en declaraciones a Europa Press.
«No hay vehículos para el traslado de inmigrantes; lo que hay son vehículos para el traslado de presos y esto es una labor humanitaria con ciudadanos que han cometido infracción administrativa. Necesitamos el apoyo de la ayuda humanitaria en las costas y necesitamos también el apoyo militar», ha añadido Vega.
Desde la asociación advierten de que las mafias que operan con el tráfico de seres humanos van «mejorando» su estrategia» y que los desembarcos ya «no duran más de dos minutos», internándose de nuevo en alta mar o abandonando una de las pateras «si tiene problemas en el motor o falta de gasolina». «Incluso las ceban y las queman», ha detallado.
Vega ha señalado que una vez que llegan a la playa, «una sola patrulla» de la Guardia Civil «no puedo gestionar» grupos tan grandes de «80 personas», por lo que los inmigrantes ilegales que optan por quedarse y no huir «es porque quieren ser enviados al CATE».
«Las mafias van cada año mejorando su infraestructura, van mejorando su material y nosotros cada año lo vamos empeorando con embarcaciones que están para un museo. Pedimos auxilio porque estamos desbordados», ha zanjado.