Andalucía

Los granadinos, ofendidos en redes con La Resistencia por chistes «clasistas» sobre su acento y sus tapas

Los granadinos no han recibido muy bien las bromas de La Resistencia que una de la cuatro patas del programa, Jorge Ponce, ha dirigido esta semana contra la provincia.

Las redes sociales acusan al late night de hacer humor «sin gracia y clasista» sobre su acento y las tapas de sus bares. Lo cierto es que Ponce lleva semanas ‘faltando’, una a una, a todas las provincias de España. Y las 51, sin excepción, pasarán por sus chistes sobre los tópicos y clichés más característicos de cada región.

Una sección del programa que, como siempre, arrastra un amplio abanico de reacciones en redes. Desde los que reciben los chistes con simpatía hasta los que, con piel más fina, los encajan como un ataque personal a sus costumbres y raíces.

En el programa del lunes, Ponce comenzó subrayando que «Granada es muy bonita». «Puedes estar en el barrio del Albaicín viendo la Alhambra y Sierra Nevada y que venga un camarero y te diga: ¡¿Qué quieres?!», dijo imitando el acento granadino. «La ‘malafollá’ es su identidad y están orgullosos de ello, pero no se puede tener por identidad el ser desagradable», afirmaba, para después hacer un último chiste: «La tapa granadina es famosa no porque esté buena, sino porque te pides una caña y te ponen de tapa un cubo de pan rallado y, con la segunda caña, un saco de garbanzos».

Hasta el momento, el vídeo con la citada intervención de Ponce en La Resistencia es el que más comentarios acumula en Twitter y de los que más interacciones de usuarios ha provocado.

«Qué tío más tonto», «el típico graciosillo de clase», «qué mierda de programa, no hace nada de gracia», «más payaso imposible», «tiene la gracia en los huevos», «no encuentro el contexto humorístico», «qué asco de tío», «¿me tengo que reír?», «qué mala es la envidia» o «aquí se han columpiado pero bien» son algunas de las respuestas de los granadinos a la broma de Ponce. «No se puede sacar nada malo de Granada si no es mintiendo», apuntaba un usuario, mientras que otra, con más gracia, afirmaba que «llevaba tres días sin reírme y ahora llevo cuatro».

Algunos usuarios han incluso más allá y han tachado al humorista de «gilipollas» o de no tener «ni puta idea» y han criticado al programa por sus chistes: «Ahora además de no tener gracia, son clasistas». Twitter se ha inundado de granadinos mostrando fotos de tapas de los bares de la provincia para rebatir a Ponce: «Te ponía un trailer de pan rallado para que te ahogaras dentro», comentaba otro, ofendido.

La vertiente con más sentido del humor ha preferido reírse de ellos mismos y han aplaudido las ‘faltadas’ a Granada: «Por fin nos ha tocado», celebraba un tuitero. «Me meo viva», «la verdad es que lo ha clavado», «lo ha bordado», «verídico como la vida misma» o «soy granadino y me ha hecho gracia» son otros de los comentarios al respecto. Otros paisanos recalcaban: «No os lo toméis tan a pecho, que es humor. La gente que se indigna de verdad con esto…».

Chistes a otras provincias andaluzas

En programas anteriores, Ponce ha hecho humor con otras provincias andaluzas como Sevilla, Jaén, Almería y Córdoba.

Sobre Sevilla, el humorista malagueño comenzó lamentando los estereotipos y prejuicios hacia los andaluces, para terminar sentenciando: «No todos somos sevillanos». También destacó que «Sevilla es tan bonita que mola pese a los sevillanos».

Al hablar de Jaén, señaló que «me da pena dar una hostia ahora a Jaén con las que le está dando ya la Policía de Linares. Y lo más triste es que el más famoso de Jaén seas tú», en alusión al presentador del programa, David Broncano.

Cuando le tocó el turno a Almería, destacó su valor por demostrar «que la vida se abre paso hasta en las condiciones más extremas». También aludió a las películas que se han rodado en la provincia, que «son todas del género ‘se está mal’: ‘Conan el Bárbaro’, películas del Oeste, cosas de Marte y del desierto… Allí no han grabado Amelie».

Los cordobeses también han sido objeto de su chistes. De la capital afirmó que a pesar de que «está muy guay, se le nota el complejo de que el novio de antes molaba más: el califato, el moro guapo».

Los andaluces ya se han indignado en ocasiones anteriores con otros programas como El Hormiguero por una imitación de la ministra María Jesús Montero, motivo también de polémica. Lo que está claro es que el acento andaluz y el humor al respecto es la historia interminable.