Viajes

La ruta pontevedresa de los 57 molinos gallegos

Galicia tiene muchos lugares conocidos. Desde la parte final del Camino de Santiago hasta edificios abandonados. Pero hay otros que lo son menos. Eso sí, no por ello dejan de ser dignos de mención. En esta ocasión proponemos ir a la provincia de Pontevedra y allí hacer una ruta con un gran encanto. Hablamos de la “Ruta de los molinos del Folón y el Picón”.

Molinos por doquier

En esta caminata hay un total de 57 molinos que se construyeron entre los siglos XVIII y XIX. Están situados en la ladera de Campo do Couto. Y desde allí se puede ver la desembocadura del río Miño y el valle del Rosal.

Estos molinos se emplearon para moler grano y fabricar harina. Para ello, aprovechaban un salto de agua de 75 metros. Su restauración se llevó a cabo en los años 90 por iniciativa del ayuntamiento de O Rosal. Es más, esta reconstrucción se ha realizado con todo detalle, conservando todos los elementos de la época. Lo mismo ha ocurrido con los caminos, que han sido acondicionados para poderlos visitar con mayor comodidad.

Como hemos comentado, hay un total de 57 molinos divididos en dos vertientes: 36 del río Folón y 21 del río Picón. El inicio del recorrido parte de A Ponte das Penas. Después asciende paralelo al río Folón y desciende junto al río Picón. Se trata de una ruta circular de unos 3,5 Km. con poca dificultad.

El encanto de los molinos

Los molinos están ubicados en forma de escalera. El objetivo era aprovechar la fuerza de la corriente. Como apuntamos, el sendero va descendiendo entre pinares junto al río Picón donde además se el viajero se encuentra pequeños saltos de agua como la cascada del río Folón.

Para finalizar, comentar que se trata de una ruta que apta casi para todos los públicos, pero que no dejará indiferente a nadie. ¿Las razones? La belleza del entorno, la ubicación de los molinos y las vistas tan maravillosas que se pueden apreciar desde allí.