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Telefonía

Me he encontrado un móvil en la calle: lo que no debes hacer

Actuar siempre con sensatez es nuestra primera opción.

  • Nacho Grosso
  • Cádiz (1973) Redactor y editor especializado en tecnología. Escribiendo profesionalmente desde 2017 para medios de difusión y blogs en español.

Cada día se pierden en el mundo cientos de teléfonos móviles. Gran parte de  ellos no son recuperados por los dueños, que han de invertir esfuerzos y dinero en adquirir un dispositivo nuevo. Un móvil encontrado en la calle siempre es una enorme tentación. Pero hay que reconocer que tener en las manos un teléfono ajeno no es ninguna suerte. Los sistemas de identificación biométrica hacen que acceder al contenido de un dispositivo sea muy complejo. Al menos, para un usuario corriente.

Algunos desalmados, al encontrar un teléfono en la calle, no hacen otra cosa que desmontarlo para venderlo por piezas. Pantalla por un lado, placa base por otra. No interesa en contenido, es decir, los datos, sino las piezas que se pueden aprovechar. Así que, si encuentras un móvil en la calle, te damos una serie de recomendaciones para actuar bien.

¿Qué hago si me encuentro un móvil en la calle?

Muchas personas usan las redes sociales. Es decir, hacen una foto del dispositivo y la suben a Twitter, a que esta red «haga su magia».  Puede ser una buena opción, pero hay que tener en cuenta que alguien que ha perdido su dispositivo también ha perdido su acceso a las redes, a no ser que entre desde un ordenador. Y créeme, si pierdo mi teléfono, lo último que hago es consultar Twitter. Hay 2 opciones muy sensatas si hemos encontrado el acceso a un dispositivo.

Entregarlo en comisaría

La primera es la más recomendable, depositarlo en una comisaría de policía o puesto de la Guardia Civil. Desde ese momento, el teléfono queda custodiado y tú te liberas de llevar encima algo que no es tuyo. Además, ponte en el lugar de la persona que lo ha perdido. ¿A quién va a recurrir? Pues a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

Si en tu población hay una Oficina de Objetos Perdidos, entregarlo allí es siempre tan seguro y eficaz como hacerlo en la policía. Son generalmente las capitales de provincia las que cuentan con estos lugares.

Esperar a recibir una llamada

Otra opción es quedarse con el teléfono y esperar a que el dueño llame. De esta forma, y si no estás ocupado, podéis concertar una cita para que se lo entregues. Un bonito gesto que es de agradecer.

¿Qué es aquello que no he de hacer nunca?

Venderlo

En cualquier tienda de compra de objetos de segunda mano te van a pedir el DNI y te solicitarán que entregues el teléfono desbloqueado y puesto a cero, es decir, como salido de fábrica. Venderlo en una de estas tiendas no es una salida bajo ningún concepto.

Tampoco lo es usando cualquiera de las plataformas de segunda mano online. El comprador te solicitará la factura del dispositivo, algo que no posees. Desecha esa idea, puedes acabar denunciado.

Y por supuesto, despiezarlo para vender sus componentes por separado. Piensa que ese teléfono es el tuyo. ¿Te gustaría que acabase así?

Manipularlo

Puede que trates de acceder a él para conseguir información sobre cómo devolverlo. Intentar un código de desbloqueo o patrón típico, una contraseña, pero lo más probable es que no puedas hacerlo. Cada vez hay más móviles que se desbloquean con huella, patrón de cara, el iris del ojo…

Y aunque tus intenciones sean buenas, no es algo recomendable por una sencilla razón. Lo que contiene es información confidencial, algo que no te pertenece bajo ningún concepto. De hecho, hay sentencias judiciales en las cuales personas han sido condenadas personas por manipular el teléfono de su pareja.  De acuerdo, es el dispositivo de alguien ajeno, pero lo que hay dentro no te interesa.

Entregarlo a un desconocido

Puede que encuentres un teléfono y que por querer encontrar a su propietario, lo termines entregando a quien no es. Me explico, lo recoges del suelo, de un banco o del lavabo del aseo de un restaurante. Haces algunas preguntas para saber si este teléfono puede ser de alguien. Entonces aparece el listo que dice que es suyo o que conoce al dueño, que es amigo suyo y que ahora se lo entrega. Nunca lo des a  nadie, a no ser que es apersona sea capaz de desbloquear el teléfono en tu presencia.

Por todo esto, si encuentras un teléfono en la calle siempre has de entregarlo en una comisaría u oficina de objetos perdidos como primera opción. Es la manera más rápida de que vuelva a manos de quien lo perdió lo antes posible.