20 cosas que hemos dejado de hacer por culpa de la tecnología

Si eres de los llamados “millennials” es probable que como mucho conozcas tu propio número de teléfono o que consultar un diccionario se algo que recuerdes vagamente como algo que tuviste que hacer en el colegio. Del mismo modo, es probable que nunca hayas tenido que consultar un mapa de las calles de la ciudad o que en las últimas semanas hayas visto tantos capítulos de tu serie favorita como tus padres han podido ver en toda su vida cuando no existían servicios como Netflix o Amazon Video. Pues bien, para recordar todas esas cosas que ya no hacemos por culpa de (o gracias a) la tecnología, foxnews ha publicado un muy simpático artículo en el que repasa 20 cosas que han desaparecido o cambiado radicalmente por los avances en la electrónica de consumo, Internet y los smartphones.

Recordar números de teléfono o usar las páginas amarillas

Seguramente has visto hasta hace muy poco cómo se repartían por los hogares las gruesas guías de teléfonos, las llamadas páginas amarillas. Pues bien, hace algunas décadas, estas guías eran la única forma de encontrar un fontanero, electricista, o el teléfono de un negocio, o incluso el de un particular ya que en ellas se listaban los teléfonos fijos de los ciudadanos.

Hoy en día no necesitas ni siquiera el teléfono para contactar con la mayoría de empresas ya que tienen perfiles sociales, correo de contacto y muchos otros canales para comunicarse con los usuarios, aunque ciertamente a veces se echa de menos la inmediatez del contacto directo por teléfono (no obstante, en redes sociales este contacto puede ser igual de inmediato).

Por otro lado, ¿cuántos teléfonos te sabes de memoria? Pues hace no demasiados años, cuando lo habitual no era tener siquiera un teléfono móvil, tenías que llevar en la cartera o en el bolso una pequeña libreta de direcciones y teléfonos y, como mínimo, debías recordar de memoria los más importantes.

Grabar cintas de cassette o CD de recopilación

Con la llegada de los reproductores musicales, los smartphones y ahora más todavía con servicios musicales como Spotify o Apple Music es probable que ya se te haya olvidado aquel arte de grabar un CD de música para llevarte de vacaciones o mejor todavía, la ardua tarea de grabar una cinta de cassette con tus canciones favoritas, ya sea de tus discos en vinilo o mejor todavía, esperando pegado a la radio al momento en que sonasen. Si has vivido esa ahora lejan época quizá recuerdes con nostalgia como grabar una cinta personalizada era una de las grandes pruebas de amor que regalabas a esa persona especial.

Hoy en día, lo más que puedes hacer es mandar un enlace a esa persona especial con tu canción favorita en YouTube o Spotify… aunque es poco probable que tenga algún efecto. Evidentemente todo esto ha cambiado radicalmente ya que hasta el modo de conocer otras personas es muy distinto gracias a Internet o las apps para citas.

Llevar dinero en efectivo o monedas

Esta es otra de las cosas que está cambiando a una velocidad impredecible. Hasta hace muy poco, era muy recomendable llevar algo de dinero en efectivo para esas pequeñas cosas que no podías pagar con tarjeta. En otros tiempos, es posible que llevases estas monedas para poder usar, por ejemplo una cabina de teléfono (algo que si eres joven no habrás quizá usado nunca). Hoy en día, hasta las más pequeñas compras se pueden llevar a cabo con tarjetas de tipo contactless de forma rápida y sencilla y los sistemas de pago móvil se están extendiendo también a gran velocidad. Así, según donde vivas y el tipo de comercios en los que compres es posible que no necesites ya llevar dinero en efectivo.

Hacer cálculos matemáticos o ver la hora en un reloj con agujas

Estas son otras dos de las cosas que el artículo de foxnews repasa y que probablemente ya has dejado de hacer. Seguramente, hasta que hemos empezado a llevar smartphones (o al menos móviles con las mínimas aplicaciones) has tenido que hacer un cálculo mental en una tienda o en un restaurante para pagar una cena entre varias personas o similares. A día de hoy, directamente puedes pedirle a tu asistente de voz que haga el cálculo por ti sin ni siquiera abrir una aplicación de calculadora.

Del mismo modo, es casi seguro que no te plantees que sea necesario un reloj para saber la hora y es probable que hasta hayas perdido la costumbre de verla en un reloj analógico. De hecho, si eres muy joven, es muy posible que te cueste bastante ver la hora en un reloj de agujas y que te parezca más interesante llevar una pulsera para salud o un reloj inteligente, aunque sólo sea por llevar otra pieza de tecnología pegada.

Como sucede siempre en este tipo de revisiones de cómo ha cambiado la vida con la tecnología, dependerá mucho de tu edad el que recuerdes con más o menos nostalgia alguna de las cosas que hemos dejado de hacer, es posible que algunas directamente no las hayas vivido (como escribir cartas a mano, usar una máquina de escribir o mandar postales), y es posible que otras las sigas haciendo, como leer periódicos impresos o imprimir tus fotografías para guardarlas en álbumes. En cualquier caso, resulta interesante de vez en cuando echar la vista a trás para ver qué rápido cambia todo: quizá en unos años nos parecerá incomprensible tener que aprender a conducir un automóvil o ir a una oficina a trabajar, ¿no crees?