Sucesos
AGRESIONES SEXUALES

Ya son 27 las denuncias contra el entrenador de Huelva detenido por agresión sexual a menores

Ya son 27 las denuncias contra el entrenador de Huelva detenido por agresión sexual a menores. El hombre, de 62 años, permanece en prisión provisional por orden judicial mientras crece cada semana el listado de mujeres, muchas menores, que presentan denuncia ante los agentes de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM). La investigación se extiende a Extremadura, donde el acusado entrenó a un equipo de Badajoz y la Policía continúa buscando más víctimas con la sospecha de que el presunto agresor podría llevar casi una década actuando.

Ante el creciente número de denunciantes, la abogada de seis de las víctimas, la letrada Patricia Catalina, ha solicitado al juzgado instructor la apertura de una pieza separada de responsabilidad civil con el embargo de las cuentas y bienes del acusado. Todo para asegurar las futuras indemnizaciones para las víctimas en caso de una sentencia condenatoria.

Han sido esas víctimas las que han reunido el valor suficiente para denunciar los hechos, e impedir que más niñas corran la misma suerte, denunciando a un presunto agresor sexual muy activo que aprovechaba cualquier ocasión para actuar, según los investigadores.

En sus declaraciones, las víctimas, algunas todavía menores de edad, han relatado «tocamientos lúbricos» en campos de fútbol, en los vestuarios y en las duchas. Los presuntos abusos se producían durante los entrenamientos, en los viajes para disputar torneos fuera de la ciudad, en el teatro o en la vía pública. Sin embargo, las agresiones más graves tenían lugar en el despacho de enfermería del presunto pederasta en la Universidad de Huelva. Allí, con la excusa de darles masajes a las jugadoras, el entrenador presuntamente las agredía sexualmente.

Si las menores se resistían a los masajes, las acosaba por las redes y las aplicaciones de mensajería con mensajes como este: «Hoy te tengo que dar un masaje sí o sí, yo te recojo y le dices a tu madre que te vas con las amigas». También le acusan de obligar a las niñas, algunas de 13 o 14 años, a desnudarse en su despacho para probarse ropa deportiva, arrebatándoles sus prendas íntimas mientras se probaban las nuevas. Algunas de esas prendas las halló la policía durante el registro de la taquilla del acusado en las instalaciones de la Universidad.

Precisamente, la Universidad de Huelva ha solicitado personarse en la causa como acusación popular. Un movimiento que va a contar con la oposición de la acusación particular de las víctimas. Estas consideran que la Universidad no tiene legitimación ninguna en el proceso, máxime cuando los hechos más graves que se denuncian se podrían haber cometido en sus instalaciones y por tanto se le podrían exigir responsabilidades en un futuro próximo.