Sucesos
Madrid

Un padre acusado de verter agua hirviendo sobre su hijo de tres años

El niño ha tenido que ser sometido a una intervención quirúrgica

Un dramático caso de presuntos malos tratos infantiles ha conmocionado a la ciudad de Madrid durante este fin de semana. Un niño de apenas tres años ha tenido que ser sometido a una intervención quirúrgica debido a graves quemaduras de segundo grado provocadas por agua hirviendo. Un hecho punitivo que la familia materna achaca directamente al padre del menor.

Según la familia este hecho constituye un posible caso de violencia continuada contra el pequeño, ya que sus familiares maternos aseguran que no se trata de un hecho aislado, sino que el niño habría regresado en varias ocasiones con diferentes lesiones tras pasar tiempo con su padre.

Marisol, abuela del menor, ha expresado su temor y desesperación ante la situación: «A la próxima me lo mata». La mujer ha revelado que el lunes retirarán las vendas al pequeño y será entonces cuando puedan evaluar el verdadero estado de la piel del niño tras el vertido de agua hirviendo.

Los hechos ocurrieron el pasado sábado, pero sorprendentemente la familia materna no fue informada hasta el domingo. Según relata la abuela, el menor fue ingresado en el hospital bajo un nombre falso, lo que habría sido un intento deliberado de ocultar lo sucedido: «El niño ingresó con un nombre que no era el suyo, nos mintieron (…) Le cambian el nombre con motivo de que no pudiéramos verlo para no denunciarlo».

En un desgarrador testimonio en El programa de Ana Rosa, Marisol ha explicado que cuando la tía del niño subió a planta y le preguntó quién le había hecho daño, el pequeño respondió sin dudar: » Illa «. Según aclara la abuela, así es como el niño llama a su padre. «Yo quería pensar que era la chica con la que está, pero el niño dijo directamente Illa», ha explicado visiblemente afectada.

La tensión en el hospital alcanzó niveles extremos cuando los familiares maternos intentaron obtener explicaciones del padre: «Le pegó dos patas a mi hija», asegura Marisol, quien además añade que «nos quisieron agredir. Un hombre dijo que iba a por las pistolas. Salieron las enfermeras y nos ayudaron».

Lo más preocupante de este caso es que, según relata la familia materna, no sería la primera vez que el pequeño sufre lesiones bajo la custodia de su padre. Hace apenas un mes, y tras varios retrasos en la entrega del menor a su madre, el niño regresó al hogar materno «golpeado, con la oreja como que le pegaron un bocado y la traía morada y arañazos en la cara». Los progenitores llevan meses separados, lo que añade un componente adicional de conflicto familiar a esta dramática situación.

Por su parte, el padre del menor ha publicado un vídeo en redes sociales para ofrecer su versión de los hechos, en el que también profiere graves insultos contra la madre del niño. Según su relato, lo ocurrido fue simplemente «un accidente con el cubo de agua», que supuestamente estaba sobre el coche y se le cayó encima al pequeño.

En el mismo vídeo, el progenitor acusa a la madre de querer perjudicarle: «Esa gitana es una pe***. Me quiere meter preso», afirma en unas declaraciones que podrían complicar aún más su situación legal.