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Verano

Pánico por lo que dicen los expertos: se avecina un verano infernal difícil de soportar

El verano climatológico ha comenzado con temperaturas anómalas y una gran inestabilidad meteorológica, que anticipan un verano duro y sofocante. De este modo debemos estar atentos a lo que dicen los expertos, ya que se avecina un verano infernal difícil de soportar.

Se avecina un verano infernal

Los meteorólogos y expertos ya alertan del verano que nos espera, con olas de calor que serán más frecuentes, intensas y duraderas que lo habitual.

Una ola de calor se define como un episodio de al menos tres días consecutivos en los que las temperaturas máximas superan en 5 °C el valor normal para la época del año en al menos el 10% del territorio. Estos episodios son peligrosos para la salud humana, la agricultura, los ecosistemas y el medio ambiente, ya que pueden provocar deshidratación, golpes de calor, incendios forestales, sequías y contaminación.

Y varias olas de calor se esperan para este verano, según la predicción de los meteorólogos aunque los hay que matizan lo que vamos a vivir ya que aunque el verano de 2023 se prevé caluroso, en palabras del meteorólogo José Manuel Viñas: «Es poco probable que este verano sea tan extremadamente caluroso como el de 2022, a pesar de que la predicción estacional del Centro Europeo para junio, julio y agosto señale que las temperaturas en este periodo estarán por encima de la media».

Viñas añade que lo que podría suceder es que de nuevo «el calor extremo vuelta estar presente este año» por lo que «contaremos con «alguna ola de calor».

En cuanto al tiempo en lo que queda de mes, los expertos aseguran que hasta mediados de junio se va a mantener el ambiente «tormentoso» de los últimos días, aunque no por ello se va a resolver el problema de sequía que tenemos.

Temperaturas muy por encima de la media

Por otro lado, José Antonio Maldonado, director de meteorología del portal Meteored, recuerda que el de 2022 fue el verano más caluroso desde el año 1981, con tres olas de calor, con una de ellas, la del 9 al 23 de julio que fue la peor de todas. 

Además, las «temperaturas diarias quedaron en promedio 2,6 °C por encima del valor normal, mientras que las mínimas se situaron 1,9 °C por encima de la media».

Según este experto, es pronto para saber si ocurrirá lo mismo este año, aunque parece que de nuevo se podrían registrar nuevos récords, sin que se sepa todavía «dónde y en qué medida».

Por otro lado, está el hecho de no olvidarse de que este verano debemos tener en cuenta la transición de La Niña, la fase fría que ha durado tres años, a El Niño (fase cálida) en las aguas del Pacífico tropical, por lo que se espera una «área de anomalías de altas presiones fuertes en el noroeste del continente europeo, concretamente Reino Unido, Irlanda y el oeste de Escandinavia. Frente a esto, en la Península Ibérica se generará una marcada anomalía negativa de presión por bajas térmicas y por otras de diferentes orígenes. Tenemos señales de que las tormentas serán más activas de lo normal» tal y como explica por su parte el meteorólogo Francisco Martín que añade que este año los registros de temperatura en Europa «podrían superar en 1 o 2 ºC el promedio histórico».