Asesinato en Tailandia

El mensaje que publicó en sus redes el cirujano asesinado por Daniel Sancho el día de su muerte

Daniel Sancho: «Soy culpable pero yo era el rehén de Edwin, me hizo destruir la relación con mi novia»

Daniel Sancho
Foto: @dredwinarrietacirujanoplastico

Daniel Sancho, hijo de 29 años del famoso actor español Rodolfo Sancho, se encuentra bajo custodia policial en Tailandia tras ser acusado de asesinar y desmembrar brutalmente al cirujano colombiano Edwin Arrieta Arteaga. El suceso tuvo lugar en la isla de Koh Pha Ngan, un destino popular entre los turistas y que celebra su fiesta de la luna llena, uno de los grandes atractivos del lugar. Según el relato ofrecido estos días, la última vez que se vio con vida al médico fue el miércoles, 2 de agosto. Unas imágenes de ese mismo día muestran a la víctima y a Sancho montados en una motocicleta. El cirujano lleva puesta una camiseta negra, como la que después apareció en el vertedero junto a sus restos.

Precisamente, ese mismo día, las redes sociales del cirujano mantenían aún actividad. Su cuenta en Instagram publicó su último post, el antes y después de una lipoescultura, una de sus especialidades.

Fuente: @dredwinarrietacirujanoplastico

Según las autoridades tailandesas, el cuerpo desmembrado de Edwin Arrieta fue descubierto en un vertedero local, cuidadosamente empaquetado en bolsas negras. Sancho confesó el crimen, alegando «celos y miedo a la traición». Según la investigación, ambos se conocían antes de viajar a Tailandia como turistas. Fue el joven español el que, el 3 de agosto, denunció la desaparición de su amigo.

Los informes sugieren que la víctima había llegado a la isla el 31 de julio para pasar unas vacaciones junto a Sancho. Aparentemente, mantenían una estrecha relación, disfrutando de restaurantes locales y atracciones turísticas antes de que Arrieta desapareciera misteriosamente, el 2 de agosto.

Los medios locales han informado que las cámaras de seguridad captaron al hijo del actor comprando cuchillos, una sierra y bolsas de basura al inicio de la semana, lo que aumentó las sospechas sobre su participación en el crimen. Sancho fue trasladado a la comisaría el viernes 4 de agosto para ser interrogado, donde negó en un primer momento cualquier tipo de implicación en la desaparición de su amigo colombiano para después acabar confesando el crimen.

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