Sociedad

Maite Pagazaurtundúa: “En UPyD hubo gente que se hizo ilusiones de tener cargos públicos”

Pagazaurtundúa denuncia tremendas presiones para unirse con Ciudadanos “por tierra, mar y aire”. Confiesa que no sabe hasta dónde llegará la vida de UPyD pero ese camino “merecerá la pena”. Esa crisis ha hecho que muchos integrantes fueran abandonado, les desea suerte pero les acusa de que les pudieron sus ansias de poder.

¿Cuál es el balance que hace Maite Pagazaurtundúa de un año de trabajo en el Parlamento Europeo?

Es una experiencia muy intensa. El Parlamento Europeo se acumula lo mejor y lo peor de la política española y europea. Es un observatorio internacional, estamos obligados a trabajar con gentes de muchos países y nos da un angular muy amplio de cuál es la realidad. Una percepción clara de que todos nuestros problemas están interrelacionados. Estamos en el mismo barco, el mundo está globalizado. En la última aldea de Etiopia donde he estado, de barro, con fuego en el suelo… tenían televisión y sabían de nuestro mundo a tiempo real. Sin embargo, es muy frustrante porque nosotros no somos una auténtica cámara legislativa ordinaria. No tenemos la gobernanza de Europa, no somos lo «Estados Unidos de Europa» y los estados se amparan en el Consejo para escamotear sus responsabilidades en cosas que son muy graves.

Su papel en esta institución es cada vez más relevante al ser nombrada vicepresidenta del Grupo Liberal. ¿Cuáles son los avances concretos por los que recordará de buen grado su paso por la Eurocámara?

Estoy llevando son aquellos relacionados con la inmigración, los refugiados de guerra y con el tema del terrorismo. Son dos temas clave y, especialmente, en el tema del terrorismo tengo una experiencia larga y por tanto puedo ayudar. Puedo ayudar sobre todo, más que en los papeles que redactamos, en crear actitudes sensatas y abiertas con respecto al fenómeno del terrorismo y sus múltiples caras. Es muy importante que enfrentemos con eficacia el problema, que no intentemos sacar ventaja fácil a nuestros adversarios ideológicos. Nos estamos jugando la libertad y la seguridad todos. La amenaza, en este caso, es mucho más seria de lo que nunca habíamos conocido en ningún lugar del mundo. Necesitamos ser listos, no perder el tiempo, no cometer errores y aprender. Los españoles tras 50 años sabemos en torno al fanatismo, cómo generan entornos, cómo generan espacios, cómo someten con el miedo a parte de las poblaciones. En el País Vasco todavía hay muchos pueblos sometidos a la ideología violenta, pensar que los asesinos son héroes. Sabemos muchas cosas de nuestros errores, y otras por nuestros aciertos.

Llegas a este grupo de mano de UPyD, un partido que según encuestas y sondeos no encontrará hueco en las elecciones. ¿Se hace la suficiente autocrítica?, ¿qué se hace para mejorar y dar la vuelta a esas previsiones no muy halagüeñas?

El momento de la política española desde hace un año y medio es muy convulso. La irrupción de Podemos dio mucho miedo a los poderes reales de nuestro país, no nos equivoquemos, es así. Ha habido mucho, mucho interés en que surgiera una fuerza alternativa a Podemos en el lado contrario. Hubo mucho deseo de que Ciudadanos y UPyD formaran ese bloque. Pero UPyD tiene una manera propia de afrontar los problemas y no le gusta que le fuercen a hacer cosas desde el exterior. Hay una apuesta muy intensa de UPyD en contra de la corrupción real. En nuestro país es muy sistémica y nos ha generado enemigos muy poderosos. Además en algunos casos ha habido una falta de inteligencia emocional. Estamos en una segunda etapa, un líder joven, Andrés Herzog, gran persona, muy honesta, un gran abogado y muy sincero con muchas ganas de regenerar pero no de postureo sino de fondo. Eso es un camino largo, complicado y difícil que no sabemos si lograremos culminar o no. Pero es un camino que merece la pena. Nos enfrentamos a grandes poderes que no quieren tocar prácticas clientelares aunque no quieren la desestabilización de Podemos. Eso no lo queremos nadie. Quieren que parezca que cambien las cosas pero que no cambien mucho. Nosotros pensamos que en España si no se cambian de verdad las cosas de fondo.

¿Cómo afronta UPyD la campaña electoral, una campaña como han comentado low cost, en un partido que tal vez ha tocado techo?

Nosotros lo que tenemos una enorme dificultad porque las reglas de juego han cambiado sobre la marcha. Nosotros como IU tenemos representación política pero no nos dejan ira los debates. El cambio de las reglas de juego de esta manera es tremendamente irregular. No se ven en este momento, porque hay una espuma como si fuera el Gran Hermano, como si la política se hubiera convertido en un talent show. Nosotros vamos a tener que afrontar la carrera en la peores circunstancias. Todo está colocado en contra de nosotros. Si nosotros tenemos una mínima representación parlamentaria vamos a ayudar muchísimo a que otros muevan piezas no solo de boquilla sino haciendo cosas de verdad.En todo caso, nosotros no pensamos en las próximas elecciones, nosotros pensamos en la sociedad de las próximas generaciones.

Como ha comentado, UPyD deja a un lado la vocación de llegar al poder para aspirar a tener una mínima representación, ¿es eso tirar la toalla?, ¿ha influido en ello que se haya adoptado una labor que tal vez no corresponde a un partido personándose en las causas judiciales de corrupción?

Es muy sencillo, todos los partidos deberían estar limpiando para que no fuera necesario tener que personarse para sacar corrupción. ¿Qué hubiera pasado en España si nosotros no hubiéramos hecho una parte importante de esa labor? Los corruptos estarían a sus anchas, nadie estaría hablando de transparencia, de regeneración ni siquiera por postureo. Sería la aceptación de un estado de cosas que estarían peor todavía. Es terrible.  Las personas honradas están teniendo una enorme crisis porque han visto que los tentáculos de este poder corrupto llegaban demasiado sitios. Nuestro país tiene un sistema en el que los amigos eran más importante que las leyes.

Nunca nos han dicho que no hayamos dicho cosas correctas nos dicen que cómo se nos ocurre tocar la corrupción.  Estamos peor gobernados, peor administrados, se han gastado miles y miles de millones de euros en obra pública absurda en infraestructuras que no son necesarias. No hemos aprovechado Bolonia para modernizar nuestros estudios pero sí para cargar de más costes. Es que todos esos fondos europeos, que no vamos a tener en el futuro, no los hemos aprovechado. Nuestro país podría ser ahora muchísimo más moderno. Y un país más competitivo y no a la precarización con la que estamos jugando. Esos becarios eternos que no tienen posibilidades de pensar en tener hijos.

Marte Pagaza, en su despacho

¿Qué escenario se plantea UPyD post 20D si no se cumplen las expectativas? Mencionan que ya se ha superado una crisis en el partido, ¿habría entonces una nueva o se plantean otras posibilidades como refundación, reconversión…?

No lo sé. No le puedo decir. Ahora en efecto inmediatamente hemos superado una crisis muy fuerte, hemos tirado para adelante con muchas ganas porque tenemos muy claro el norte. Lo que queremos es una España con justicia, con justicia social, con leyes, bien gobernada… Pensamos que hay muchas tentaciones en muchos países para acomodarse a cómo son las cosas y nosotros estamos dentro del sistema, no somos antisistema. Creemos en que nuestros hijos no tengan que pasar por tener miedo cuando descubren una corrupción. Hasta donde lleguemos, ya veremos. Pero lo que tenemos claro es que vale la pena hacer las cosas cómo queremos hacerlas. Supeditarnos a las maneras que hay tanta tentación en el camino, de que se carguen los partidos de mucha más personal del que necesitan, de hacer actos electorales y no electorales carísimos. Les generan tantas deudas que al final hacen que se supediten a ciertas gentes que les dan el dinero o a ciertas empresas a cambio de concesiones. Eso es con lo que hay que terminar. Necesitamos en España que todos hagamos campañas low cost porque nos daría a todos una enorme libertad y podríamos decir lo que verdad pensamos.

También hay sangría y fuga de nombres importantes en el partido, la lista es interminable. ¿Qué les diría ahora que muchos se han incorporado a otros partidos?

Hubo gente que entró en pánico. Cuando hubo gente que hizo un buen trabajo en el parlamento. Cuando ves esa presión externa que te dice: o te juntas con Ciudadanos y generáis una especie de fórmula que neutralice el crecimiento de Podemos o vamos a por vosotros, ves que va en serio, que va por tierra mar y aire, la gente entra en pánico. Porque se habían hecho ilusión de tener cargos públicos. Así es el ser humano. Todo el mundo no puede soportar una presión tan grande. Fue muy dura. Pasar algo así es muy duro y luego no hemos sido tan astutos como Ulises como hubiera sido necesario.Tras una crisis profunda y ahora estamos en una segunda etapa. A quien se ha ido, hay que entenderlas y desearles lo mejor siempre. Desear además que acierten mucho y podamos estar muy orgullosos de lo que han hecho.

Hablando de nombres y liderazgos, llama la atención que dice que en UPyD han faltado elementos emocionales. ¿Qué destacaría de los, si me permite, cuatro grandes aspirantes a la Presidencia del Gobierno para UPyD?

No cabe duda de que Pablo Iglesias es astuto, no cabe duda de que Mariano Rajoy es un resistente. El caso Gürtel y lo que tiene que ver con la financiación ilegal del partido es muy grave y a mi se me hubiera caído la cara de vergüenza con esa mochila de ignominia detrás. Pedro Sánchez todavía no ha demostrado demasiado en la política española. Y Alberto Rivera es un superviviente, es capaz de mutar y encontrar ventanas de oportunidad.

Y para terminar, ¿cómo ve Maite Pagazaurtudúa su pasado, presente y futuro?, ¿qué perspectivas tiene en la parte más personal?

Yo soy una persona muy optimista. En la vida  no he hecho otra cosa que pelear. Siempre he peleado por lo que creo. Nunca he pensado dónde me llevaba la corriente. Ya te digo, muchas oportunidades de estar en otros partidos más importantes pero nunca me ha importado eso. Cuando me he comprometido con algo es porque pensaba que podía aportar un poquito. Lo poquito que yo sabía, con pasión. Eso es lo que pretendo seguir haciendo.