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¿Sabes por qué andar es realmente tan saludable?

Aunque seguro que en más de una ocasión has escuchado que caminar de forma regular es bueno para la salud y que deberíamos andar una media de 10.000 pasos al día, no lo sabes todo sobre este buen hábito. Aprende por qué andar es realmente tan saludable.

Últimamente cada vez hay más gente con relojes o apps móviles que ayudar a llevar el recuento de la actividad diaria. Es posible que no sepas exactamente cuáles son los beneficios de caminar o qué es lo que debe tenerse en cuenta para que este ejercicio sea realmente efectivo y saludable.

En este caso la velocidad de la marcha ¡cobra importancia!

 Aunque siempre será mejor que elijas caminar antes que coger el coche o desplazarte en transporte público sea cuál sea la velocidad a la que camines, si estás decidido a caminar en beneficio de tu salud ¡debes tener en cuenta que el ritmo que adoptes tiene consecuencias!

Está demostrado que, a mayor intensidad en el andar, mayor consumo de oxígeno, lo que a veces es negativo para personas que sufren problemas respiratorios; pero en el caso de las personas que no sufren dificultades de este tipo, la velocidad suele asociarse con la consecución de mejores estados de forma.

En el caso de personas con diversas enfermedades, se asocia también con algunas mejoras en el control de su enfermedad. Así que siempre que puedas acelera el ritmo (aunque siendo siempre prudente con la progresión de la intensidad) y esfuérzate en mantenerlo para ir mejorando tu resistencia a largo plazo.

¡Y podrás mejorar tu rutina siguiendo estos sencillos consejos!

Aunque andar puede parecer el más sencillo de los ejercicios físicos, porque al final se trata de la base de la mayoría de los movimientos que realizamos a diario, si queremos tomárnoslo en serio, es de lo más aconsejable establecer una planificación.

Esto es, sobre todo, para evitar lesiones y para conseguir una adecuada persistencia de la actitud con la que finalmente consigamos que la práctica del ejercicio sea sostenible.

Para ello, es muy interesante tener en cuenta factores como el horario en el que vamos a salir a caminar -y es que lo mejor es evitar horas tardías o de climatología adversa porque ambas pueden dificultar el ejercicio de forma innecesaria además de comprometer la calidad de nuestro descanso al final de la jornada-.

También el recorrido o la compañía, pues siempre será beneficioso caminar por lugares nuevos (para evitar la monotonía y la desmotivación) y hacerlo con alguien que tenga un nivel de preparación similar al nuestro o incluso un poco mejor, pues su nivel nos será de ayuda para mejorar nuestro rendimiento.

Recuerda siempre realizar algunos estiramientos de la musculatura del tren inferior antes del inicio de la caminata, usa calzado y vestimenta apropiados para el terreno en el que te moverás (vigilando especialmente el estado de las plantillas para los pies) y sobre todo si eres principiante, comienza con un ritmo lento que posteriormente podrás ir incrementando según tu forma física y el objetivo que te has propuesto.