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Esmegma y la importancia del cuidado de la higiene personal

Te sorprendería saber la gran cantidad de procesos que realiza nuestro cuerpo, muchos de los cuales no tenemos ni la menor idea. En este artículo vamos a explicarte qué es el esmegma y, de paso, por qué la higiene personal es tan importante en los humanos.

El esmegma es una sustancia espesa, maloliente y blanquecina que suele acumularse en los genitales, sobre todo los masculinos. Especialmente común en los hombres jóvenes, tanto su olor como su aspecto -similares a los del queso- resultan desagradables. Pero además se trata de un problema de salud, ya que la presencia de esmegma puede provocar infecciones genitales severas.

¿Qué causa el esmegma y cómo evitarlo?

Dada la potencial gravedad de dicha problemática, también conocida como temiga, debemos actuar al momento que observamos esta secreción natural del organismo. A pesar de que cumple funciones relevantes, relacionadas con la lubricación del pene y la vagina, grandes cantidades de esmegma podría suponer una inflamación e infección de la zona. Si bien hay tratamientos, son dolorosos.

En general, el temiga no se acumula en las partes íntimas a menos que haya una falta de higiene de varios días o semanas. Transcurrido este tiempo, esa secreción se une a otros desechos del metabolismo y por eso produce un olor tan desagradable. Según la European Academy of Dermatology and Venereology, entre los restos destacan la grasa, las hormonas y la piel muerta.

¿Quiénes tienden a sufrirlo más a menudo?

Aunque cualquier hombre puede padecer de esmegma, son aquellos con fimosis o frenillo corto los que más tienden a sufrirlo. Hay una buena explicación, y es que el prepucio nunca deja de cubrir la zona donde se genera la sustancia y eso dificulta su limpieza. Calculan los científicos que los hombres con fimosis o frenillo corto tienen hasta un doble de probabilidades de sufrir de temiga.

¿Quiere decir esto que los hombres que tienen el glande al descubierto están a salvo del esmegma? Para nada, ya que la clave está en la higiene. Puede que sea menos probable que acumulen temiga, pero si no se higienizan correctamente acabarán también con ese olor en sus partes íntimas. Eso podría afectar negativamente a su sexualidad y autoestima.

Por eso debes anticiparte a las inflamaciones e infecciones, duchándote con regularidad y usando jabón especial para los genitales. Así impedirás que estas secreciones pongan en riesgo órganos y zonas delicadas que se infectan de inmediato.