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Cómo disfrutar en la cinta de correr

Cuando nos disponemos a practicar algo de running tenemos básicamente dos opciones. Hacerlo al aire libre o quedarnos a cubierto y entrenar sobre una cinta de correr. Cualquiera es válida. Hay gente que no tiene la posibilidad de hacerlo en la calle por falta de tiempo libre o simplemente porque no hay un espacio adecuado para entrenar cerca de su hogar. En este artículo te mostramos cómo disfrutar en la cinta de correr. Es importante que a la hora de ejercitarnos nunca perdamos la motivación, por eso hay que sacarle el máximo partido posible a las condiciones que nos ofrece este aparato.

Variar la inclinación

Como ya sabrás, correr en cuestas nos resulta muy beneficioso para mejorar el rendimiento. Pues cuando entrenes en el gimnasio o en tu casa sobre la cinta también puedes regular la inclinación para añadir un toque de dificultad a la sesión. A menor inclinación y mayor velocidad conseguirás hacer un entrenamiento más aeróbico, mientras que si es al revés (mayor inclinación y menor velocidad) estarás ejercitando la musculatura de las piernas.

Modificando la inclinación es posible aumentar la quema de calorías hasta en un 57%. Puedes planificar tus sesiones sobre la cinta de correr de manera que vaya creciendo la dificultad. Al término de la sesión no te olvides de estirar, sobre todo porque los músculos habrán soportado un exigencia más alta.

Intensidad

Existe la opción de hacer unos entrenamientos más duros añadiendo más intensidad a la cinta de correr. Puedes añadir algunas incursiones de alta intensidad en forma de esprints. Hay muchos corredores que optimizan la calidad de los entrenamientos trabajando por pulsaciones. En ese caso será necesario que cuentes con un pulsómetro y una cinta para el pecho que controle tu frecuencia cardíaca.

En el caso de que corras siempre al mismo ritmo lo único que conseguirás será estancarte en todos los sentidos.

Programas

Casi todas las cintas de correr cuentan con programas preestablecidos que se encargan de cambiar automáticamente los parámetros del entrenamiento. Sería aconsejable que cada día optases por uno distinto para no caer en la rutina y de esa manera estimularías tu metabolismo.

Lo más normal es que funcionen por intensidad, por lo que puedes comenzar a un ritmo más bajo e ir subiéndolo poco a poco. Otros programas, sin embargo, realizan oscilaciones en la intensidad durante el tiempo que dura la sesión. Para que te resulte más ameno el ejercicio físico sobre la cinta puedes acompañarte de música. Además de estar entretenido te servirá para motivarte.

Para disfrutar al máximo de esta máquina lo adecuado sería cambiar con regularidad los tipos de entrenamiento, evitando en todo momento caer en la rutina. Las máquinas de correr nos ofrecen una gran variedad de posibilidades, así que está en nuestro mano saber aprovecharlas. Hay mucha gente que cuenta con una en su casa porque le aporta mucha libertad para ejercitarse, ya que puede utilizarla a cualquier horas del día y en invierno sabe que no pasará frío ni se mojará. ¿Tú que prefieres?