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Trucos para comer pasta más saludable

Aunque nos encante el queso rallado encima de la pasta, siempre aporta más cantidad de sal y grasa.

La pasta es un alimento altamente consumido por los deportistas. Es rápida y fácil de hacer, podemos combinar diversidad de alimentos, pero debemos tener especial cuidado con los aliños y las salsas porque entonces podemos consumir más grasa de lo normal. No es que tengamos que comer la pasta pelada y con pocos ingredientes, hay mucho más.

Nada más lejos de la realidad, puesto que combina con casi todo lo que podamos tener en la cocina. Pero siempre es posible comer pasta más saludable. ¿Cómo? te lo explicamos.

Añade verduras

Como decimos, cocinar pasta es una gran suerte, pues en este caso, y para que sea mucho más saludable, recomendamos añadir diversos tipos de verduras. Así, por ejemplo, tenemos pasta con judías, con col, brócoli, espinacas… Y es una perfecta combinación porque las verduras que hemos citado ofrecen gran cantidad de vitaminas y minerales, además de fibra.

La salsa, elaborada en casa

Cuando queremos añadir salsa, por ejemplo de tomate, siempre es mejor hacerla de manera casera. Estará más rica, tendrá más propiedades, sin aditivos ni colorantes y además podemos añadir hierbas distintas, con lo que se potencia el sabor. Es una manera más de comer pasta más saludable. ¿Te animas?

Menos cantidad en el plato

Es normal que los deportistas suelan comer un buen plato de pasta, pero pese a que es un buen alimento que nos da energía, nunca debemos pasarnos. Es mejor comer menos cantidad y más veces al día. Pues tendremos un efecto saciante importante, no tendremos hambre a todas horas y regularemos nuestras rutinas.

Menos queso, salsas y otros

Aunque nos encante el queso rallado encima de la pasta, siempre aporta más cantidad de sal y grasa. Si queremos combinar el queso con la pasta, entonces mejor optar por un queso fresco. Una combinación perfecta es pasta integral (otra opción buena para alimentarnos de forma sana), tomates y queso fresco, además de un poco de aceite de oliva y alguna hierba.

Es un plato natural que nos repondrá cuando hemos gastado energía en el gimnasio, pero también una buena comida antes de hacer ejercicio si decidimos ejercitar por la tarde.