Recetas de cocina
Recetas saludables

Receta de hummus de alcachofas y espinacas

Esta receta de hummus de alcachofas y espinacas es una de las más saludables y fáciles de preparar que existen.

  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

Esta receta de hummus de alcachofas y espinacas es una de las más saludables y fáciles de preparar que existen. La aportación de fibra y de vitaminas de esta crema que podemos usar como entrante o aperitivo con unos bastoncitos de zanahoria, apio o unos rábanos cortados bien finitos es enorme. Este tipo de recetas son perfectas para un invierno en el que tendremos una buena materia prima lista para la acción que se merece este tipo de platos. Es época de alcachofas y espinacas, toma nota de cómo prepararlas paso a paso con esta receta espectacular, un hummus destinado a triunfar.

Ingredientes:

Cómo preparar un hummus de alcachofas y espinacas

  1. Este hummus lo podemos preparar en su versión más rápida con alimentos ya cocinados o de bote. Si tenemos tiempo podemos dedicarnos a hacer esta delicia totalmente casera, cocinando los garbanzos y las alcachofas.
  2. La calidad de las conservas deberá ser la máxima posible si optamos por una elaboración rápida. Las alcachofas en conserva son una opción, como también lo serán las congeladas, pero al natural siempre tendrán un sabor más marcado.
  3. Dejaremos los garbanzos en remojo la noche antes, para poder cocinarlos el día anterior. Conseguiremos de esta manera un hummus más natural.
  4. Los garbanzos escurridos los cocinamos con agua, sal, un chorrito de aceite y una hoja de laurel. En unos minutos estarán listos, cuando estén tiernos escurrimos y nos guardamos el caldo de la cocción.
  5. Las alcachofas simplemente les quitamos la parte más dura, las hojas que estén menos tiernas y nos quedamos con el corazón. Las cocemos con agua, sal y un chorrito de limón para que conserven su color.
  6. Con las alcachofas cocinadas y escurridas. Podemos ya ponernos manos a la obra con el hummus, deben quedar muy tiernas.
  7. Ponemos los garbanzos en el vaso de la batidora, serán los primeros en quedar triturados. De esta manera crearemos la crema base.
  8. Le añadiremos las alcachofas. Esta verdura tiene un poco más de agua por lo que nos quedará un poco más tierno el conjunto.
  9. Incorporamos el tahini que es una pasta típica de sésamo que se usa para esta elaboración. Rectificamos de sal y pimienta.
  10. Para darle la alegría que todo hummus necesita pelamos y cortamos dos trocitos de ajos enteros, le dará el sabor que necesita esta mezcla.
  11. A continuación, ponemos las hojas de espinacas que servirá para darle color y alegría a la receta. No es necesario que estén cocinadas, directamente las podemos incorporar con el aceite de oliva.
  12. Añadimos un poco de caldo de cocción de los garbanzos si queremos que nos quede un resultado más cremoso.
  13. Tendremos listo un hummus de alcachofas y espinacas preparado para triunfar. Atrévete con esta receta, el resultado es saludable y delicioso.

Origen del hummus

Este plato se ha hecho popular en todo el mundo los últimos años. La búsqueda de recetas veganas saludables ha provocado que aparezcan este tipo de ‘patés’ que permiten untar el pan o servir de aperitivo. Es una buena opción si queremos prescindir de la carne y embutidos en una cena informal. Servido para picar con zanahoria y apio puede ser un primer plato o plato de tapa sin nada de procedencia animal espectacular. El aroma y la fusión de sabores que posee lo hace muy especial. El hummus es más que una crema o salsa, su historia de miles de años y su adaptación por el mundo son una prueba más de la grandeza de esta receta.

En árabe hummus significa garbanzo, aunque no solo hay hummus a base de garbanzos, como esta variación se le puede incorporar cualquier verdura para darle color, sabor y potenciar aún más sus buenas vibraciones. La ausencia de determinadas carnes en oriente y la necesidad de crear platos que sean saciantes y contengan ingredientes sencillos ha dado lugar a alimentos como éste.

El origen el hummus estaría en el Antiguo Egipto, aunque con una presentación un poco distinta. Se serviría con pan de pita y sería más un primer plato que un aperitivo. Esta crema digna de los faraones se ha ido adaptando a los territorios en los que ha llegado. La cocina es como un viento de influencias que recoge lo mejor de cada país.

El hummus tal y como ha llegado a nuestras mesas está aderezado con uno de los elementos más importantes de nuestra huerta, el aceite de oliva. Un buen hummus dependerá en gran medida de un aceite de oliva nacional que le pueda dar todo el sabor que necesitará. Con o sin tahini, con una buena dosis de buenas vibraciones a través del cilantro para decorar podremos servir un plato con historia delicioso.