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Buñuelos de pulpo al estilo Arguiñano: receta crujiente y casera

Receta de buñuelos de pulpo crujientes al estilo Arguiñano. Perfectos como entrante o tapa casera. Te dejamos los pasos aquí.

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  • Francisco María
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Crujientes por fuera, suaves por dentro y con ese inconfundible sabor del mar, los buñuelos de pulpo son una de esas tapas que siempre dejan buen recuerdo. Esta versión inspirada en el estilo de Kalos Arguiñano combina la sencillez de la cocina casera con un punto de elegancia que sorprende.
La masa, ligera y aromática, envuelve pequeños trozos de pulpo ya cocido, que al freírse quedan jugosos y llenos de sabor. Son perfectos para una comida entre amigos, como aperitivo o incluso como plato principal acompañados de una ensalada fresca. En esta receta te revelamos cómo prepararlos paso a paso, con algunos trucos para que queden esponjosos, dorados y sin exceso de aceite.

Ingredientes (para 4 o 6 personas)

Si usas pulpo crudo: necesitarás un ejemplar de 1 a 1,2 kilos, una hoja de laurel y sal.

Modo de preparación

  1. Cocer el pulpo (si es crudo)
    Si el pulpo no está cocido, lo primero es ablandarlo. Congélalo durante un día y descongélalo poco a poco en la nevera. Luego pon agua con una hoja de laurel a hervir. Cuando rompa el hervor, mete y saca el pulpo tres veces para “asustarlo” y que no se rompa la piel. Después cuécelo unos 35 o 40 minutos, según el tamaño, hasta que esté tierno. Déjalo reposar dentro del caldo unos minutos antes de enfriar.
  2. Preparar el pulpo
    Corta los tentáculos en dados de un centímetro. Sécalos con papel de cocina; si están húmedos, la masa no se pegará bien y podrían saltar al freír.
  3. Hacer la masa
    Bate el huevo con el agua o la cerveza muy fría. Añade la harina tamizada con la levadura, la sal, el pimentón y una pizca de pimienta. Remueve sin insistir demasiado: la masa debe quedar ligera, con algo de cuerpo pero sin llegar a ser espesa. Incorpora el ajo y el perejil picados y guarda la mezcla en la nevera unos 10 minutos. Ese reposo ayuda a que la masa se airee y gane consistencia.
  4. Calentar el aceite
    Pon abundante aceite en una sartén o freidora y caliéntalo a unos 170 grados. Si no tienes termómetro, prueba con una gota de masa: si sube rápido y se dora poco a poco, está en su punto.
  5. Formar y freír los buñuelos
    Mezcla los trozos de pulpo con la masa y, con ayuda de dos cucharas, forma pequeñas porciones. Fríelas por tandas, sin llenar demasiado la sartén, para que no baje la temperatura del aceite. En dos o tres minutos tendrás unos buñuelos dorados y crujientes.
  6. Escurrir y servir
    Saca los buñuelos con una espumadera y déjalos sobre papel absorbente o en una rejilla. Espolvorea una pizca de sal fina y sirve enseguida, aún calientes.
  7. Acompañamientos
    Van muy bien con un alioli suave, una mayonesa con pimentón o simplemente un chorrito de limón. Si te gusta experimentar, puedes añadir unas gotas de aceite ahumado o espolvorear un poco de perejil fresco picado por encima antes de servir.

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