Los planes del Real Madrid con Chasson Randle

La llegada de Chasson Randle al Real Madrid ha supuesto un chute de autoestima para un sector de los aficionados madridistas, expectantes ante el fichaje de un jugador que viene de una de las franquicias históricas de la NBA como New York Knicks. Sin embargo, a pesar de lo que se pueda pensar, el papel de Randle en el equipo blanco, en un principio, será secundario y limitado a una competición como la Euroliga, donde deberá ganarse los minutos y una presencia superior hasta final de temporada.

Al contrario de lo que ocurrió con Sam Van Rossom, el Real Madrid ofreció una temporada completa a Randle, un jugador cuyo físico y edad –24 años– invitan a apostar por él más allá de un contrato temporal. El bajo salario a percibir por el base, habitual para aquellos dan el salto desde la NBA, también refuerza la idea de mantener a Chasson incluso después de la recuperación de Llull, que no reaparecerá al 100% y deberá limitar sus minutos al principio.

El jugador no lleva parado todo el verano, ya que compitió en la Summer League con los New York Knicks, donde le cortaron poco antes de su fichaje por el Real Madrid, como consecuencia del traspaso de su gran estrella, Carmelo Anthony, a Oklahoma City Thunder. Este movimiento provocó la liberación del primero de los descartes NBA que el equipo blanco tenía vigilado, y en cuestión de días, la llegada de Randle a la capital se convirtió en un hecho.

En el Real Madrid tienen claro para lo que ha llegado Randle. El base de Illinois llega como último refuerzo para la plantilla madridista, provocado por la lesión de Sergio Llull. Sin el contratiempo sufrido por el ’23’, Chasson no habría arribado en la capital, por lo que su papel, al menos de inicio, será secundario y enfocado a la Euroliga, única competición en la que competirá con asiduidad, en un principio.

Su condición de jugador extracomunitario provoca que Randle no pueda jugar con el Real Madrid en Liga Endesa. El equipo blanco tiene sus dos fichas de extranjeros copadas con Gustavo Ayón, uno de los pilares de la plantilla, y Trey Thompkins, al que, después de un año jugando sólo Euroliga, su rendimiento y comportamiento ejemplar le han otorgado un puesto privilegiado de la plantilla.

La falta de interiores perjudica a Randle

Además, en el reparto de roles en la plantilla, solamente hay cinco jugadores para ocupar las dos posiciones interiores, entre los que se encuentran Ayón y Thompkins, por lo que, de contar con Randle para los partidos de Liga Endesa debería producirse una lesión de alguno de ellos, para no obligar a una carga de minutos exagerada que podría afectar al resto de interiores, especialmente a Felipe Reyes y Gustavo Ayón, de 37 y 32 años, respectivamente.

Randle es un jugador preparado para jugar al máximo nivel europeo, a tenor de los informes que maneja el Real Madrid, que hablan de un jugador de físico notable para el viejo continente, y con capacidad anotadora y de desequilibrio para convertirse en un elemento principal para el ataque de Pablo Laso. Su versatilidad –puede jugar de base y escolta–, llamó también la atención, ya que la plantilla madridista cuenta con tres generadores de juego principales, Llull, Doncic y Campazzo, y una figura exterior que pueda ceder protagonismo, pero también manejar con bote es siempre bien recibida.