Opinión

«No» rotundo del CGPJ al «sólo sí es sí» de Irene Montero

El informe del Consejo General del Poder Judicial ha infligido un serio varapalo a la Ley de Garantía Integral de Libertad Sexual del Ministerio de Igualdad de Irene Montero, más conocida como ley del  ‘sólo sí es sí’ al entender que la norma vulnera la presunción de inocencia y  «puede tener el efecto de desprotección a las víctimas».

Según los firmantes del informe, la tipificación del nuevo artículo puede incurrir en una «prohibición de defecto de protección» al resultar «irrelevante» para la norma penal el que la realización de cualquier acto que atente contra la libertad sexual, sin el consentimiento de la persona, se consiga mediante el empleo de la violencia o la intimidación o aprovechando la sorpresa o desentendiéndose de cerciorarse si el sujeto pasivo consiente positivamente o no.

Lo relevante es que la ley que pretende sacar adelante el Ministerio de Igualdad, lejos de proteger a la mujer, la desprotege, porque «para el sujeto activo del delito no tendrá mayores consecuencias si emplea un medio comisivo más lesivo que otro de intensidad menor». Es decir, Igualdad ha parido un bodrio que, de aprobarse, se volvería en contra de las víctimas de una agresión sexual, por lo que los vocales del órgano de los jueces creen indispensable incorporar a la ley una modalidad agravada de este tipo de delitos cuando concurra un medio para cometerlo especialmente lesivo, como por ejemplo son la violencia o las amenazas, imponiendo la pena en su mitad superior, algo que la chapucera ley de Irene Montero no ha tenido en cuenta, con lo que podría darse el caso de que hubiera agresiones sexuales muy graves que tuvieran un pena baja comparada con la violencia del hecho cometido.

En definitiva, el órgano de los jueces le viene a decir a Irene Montero que lo redactado por su Departamento es una chapuza de tamaño sideral. Cómo será que no ha habido un sólo vocal, conservador o progresista, que haya avalado el bodrio. Es lo que tiene meterse en honduras técnico jurídicas cuando no se tiene ni puñetera idea. Y es que más allá de la propaganda no saben hacer la «o» con un canuto