Iván el magnífico y el no plan

A la espera de sustituir a Francina Armengol en el Govern de esta comunidad, tenemos a Antònia Jover, nulidad número uno de Podemos, que tiene a su vez en la lista de espera, para a su vez llegar a sustituirla el candidato que ahora está haciendo méritos en el Consell de Mallorca, que está tratando de superarla y demostrar, algo que Jover nunca va a ser capaz de hacer, o sea alcanzar la máxima incompetencia. Porque esto es lo que hoy sin duda nos hace falta. 

En agosto de este año, recuerden la fecha, el Consell, al declarar que iniciaría la redacción del plan de carreteras, anunció que también eliminaría de las vías transitables de Mallorca 26 ampliaciones, variantes y desdoblamientos, similares a la en su día polémica, para Iván Sevillano y aláteres obviamente, ampliación de la autopista de Llucmajor-Campos.

Todas estas obras estaban previstas en el plan vigente hasta la fecha, pero los departamentos de Movilidad y Territorio del Consell insular han suprimido la posibilidad de llevarlos a cabo mientras se tramita ya el nuevo plan. Porque dicen que eliminar variantes y desdoblamientos del futuro plan de carreteras era un «compromiso» establecido por los partidos del Pacte (PSIB, Més y Unidas Podemos) en los Acords de Raixa.

Este nuevo plan podría aprobarse antes de que termine esta legislatura, pero han admitido que van «justos de tiempo» y, por tanto, es una lástima y no va a ser así. O sea que el resultado final, si siguen los mismos genios que ahora están estabulados en el Consell, será materializar un cambio en el modelo de carreteras que será, hete aquí el resultado, más verde, más resiliente y preservará el paisaje. O sea que bajo su competencia lograrán exactamente lo contrario.

De esta manera, el Pacte de izquierdas, y Sevillano en concreto, suprimirá definitivamente, como su plan estrella, la realización del quinto tramo de la llamada vía conectora -en realidad segundo cinturón de Palma- que debía enlazar la zona de Marratxí, junto al centro comercial Alcampo, y la carretera de Valldemossa, atravesando Son Sardina, que afectará a otros tantos tramos de vías urbanas de Palma, así como 26 futuros proyectos más, que a su vez van a causar otros tantos atascos viarios hasta lograr el desiderátum de que definitivamente ya no se pueda circular por Mallorca como no sea en bicicleta o andando. El nuevo plan prevé incorporar una red de carriles para bicicletas y transeúntes a fin de lograr estos objetivos. 

Sevillano, aspirante a magnífico gestor de la suma incompetencia, una vez desbancada y amortizada Antònia Jover, está haciendo ya méritos con sus deslumbrantes iniciativas y parece haber logrado con su plan estrella imprimir el impulso imparable en materia viaria para que en Mallorca regresemos al siglo XIX.

Lo que finalmente se logrará, con el soporte del resto de las izquierdas, entre ellas y en primer lugar Més. Y así alcanzará la gloria de presidir nuestra comunidad. De todo lo cual sin duda cabrá enorgullecernos porque de esta forma y con tan geniales iniciativas se habrá logrado el máximo nivel de ineptitud y con ello que Amengual y Jover sean ya una anécdota del pasado. Como decimos en latín macarrónico, mortus est qui non respirat.